“Estamos dispuestos a darle el Cine Zárate a la Xunta para que lo rehabilite”. Así de clara se mostró ayer la alcaldesa de Mugardos, Pilar Díaz, ante el anuncio de que la Dirección Xeral de Conservación do Patrimonio habría emitido una orden de suspensión de la demolición del inmueble. “No hemos recibido notificación alguna por el momento pero quiero aclarar que no hay ningún proyecto de demolición del cine, sino un informe que aconseja su derribo. Lo único que hemos hecho desde hace siete meses en el inmueble es mantener el vallado para evitar el peligro de caída de cascotes”, indicó.
Asimismo aseguró ser conocedora de que cualquier proyecto que se lleve a cabo en el edificio tiene que contar con la debida autorización de Patrimonio, “lo que no sé es si las actuaciones que se hicieron durante el anterior mandato de PP –retirada de la cubierta y eliminación de los escombros– la tenían porque yo en el Concello no la encuentro”.
Así en el informe realizado por los técnicos del departamento autonómico se cataloga de “perda irreparable” la demolición del Cine Zárate y aboga por la defensa y conservación de los valores culturales y arquitectónicos del edificio. A este respecto Pilar Díaz también se mostró contundente. “El Concello de Mugardos no va a hipotecar sus políticas sociales y de empleo para rehabilitar un edificio, ni tampoco romper su techo de gasto. Toda rehabilitación pasa por una viabilidad económica”, aclaró, “nosotros abogamos porque se mantenga el equipamiento cultural del Zárate y estamos en disposición de dárselo a la Xunta para que se haga cargo de su rehabilitación. De hecho ya estuvo en manos del Consorcio cinco años – hasta 2014 que lo recuperó el Concello– y ni lo tocaron”.
Pilar Díaz defendió la necesidad de que Mugardos cuente con un auditorio “nos da igual si es de titularidad de la Xunta si esta se hace cargo de la rehabilitación del Zárate”. En este sentido solicitará mañana una reunión con el conselleiro para abordar la situación.
La Dirección Xeral de Patrimonio también informó que realizarán los trámites previos para valorar la procedencia de la incoación de la catalogación del cine en el plazo de dos meses y, de ser el caso, establecer el alcance de su protección. n