El Miño se proclamó campeón de la Copa Ferrol de fútbol aficionado al derrotar en la tarde de ayer a la Cultural Maniños por un tanteador de 2-0.
El choque estuvo dominado en los primeros minutos por la escuadra fenesa, que creaba más peligro con sus internadas por las bandas, aunque era incapaz de acertar delante de la portería contraria.
En el minuto 24 se produjo la jugada determinante de la contienda, cuando un remate de un futbolista del Miño fue despejado por las manos por el local Alfonso para impedir que el esférico acabase en el fondo de la red. Pero esa acción fue sancionada por el colegiado con su expulsión, a la vez que decretaba el punto de penalti. Marcos García se encargó de transformarlo para poner el primer tanto en el marcador. Sin poco más que contar en la primera mitad, se llegó al final al descanso. En la reanudación, el conjunto fenés, a pesar de la inferioridad numérica, asumió más riesgos en busca de, al menos, conseguir la igualada y dispuso de ocasiones para nivelar la confrontación, pero sus jugadores continuaban sin lograr batir al meta contrario.
Además eso conllevaba que dejase más espacios para su contrincante, que no desaprovechó la oportunidad de sentenciar el choque cuando el encuentro encaraba sus últimos minutos. Una jugada muy rápida a la contra permitió que Moreira llevase el balón al fondo de la red para darle la ventaja definitiva a su formación y con ello quedarse con el trofeo.
No hubo tiempo para más, estallando la alegría en el terreno de juego con la celebración de los jugadores de Mahía antes de recoger el trofeo. n