El internacional madrileño del Arco Narón Alberto Blázquez continúa su andadura en una exitosa campaña tanto a nivel nacional como fuera de las fronteras españolas.
En esta ocasión el deportista del Arco Narón formó parte de la línea de tiro de la segunda cita de la Copa del Mundo en sala, competición que en este final de año se trasladó a la ciudad de Bangkok, en Tailandia. Blázquez, el único español en la prueba de arco compuesto, concluyó prematuramente su actuación, si bien con un excelente sabor de boca. Y es que el deportista de la entidad naronesa fue uno de los “top 10” de esta segunda parada del trofeo internacional, ocupando la novena posición entre un total de 90 competidores llegados de todos los rincones del globo.
Blázquez comenzó su concurso con una gran primera tirada desde los 18 metros, con 30 flechas con las que sumó 295 puntos, cifra que lo catapultaba a la octava plaza en este “round” inicial de la competición asiática. Sin embargo, el del Arco Narón no pudo continuar con este elevado acierto en la segunda de las tiradas en la que, si bien siguió con altos números, su casillero final quedó en 290. Un 585 que situó al madrileño en la decimosexta plaza y emparejado para el primero de los duelos eliminatorios con su inmediato perseguidor, el iraní Majid Kianzad –584–.
Blázquez tuvo algunas dificultades para deshacerse de su contrincante en la primera ronda, la correspondiente a dieciseisavos de final, imponiéndose a Kianzab por un ajustado marcador de 146-147. Sin embargo, el sorteo quiso que el ganador de este enfrentamiento se viese las caras con el primero del “round”, un Mike Schloesser que cortó el camino del madrileño por 150-146, dejándolo en la novena posición de la tabla clasificatoria final.
Cabe señalar que el holandés se hizo con el oro en esta Copa del Mundo, ganando en la final al estadounidense Schaff (149-147).