Un emotivo acto sirvió ayer para recordar a Elisa Abruñedo, la vecina de Cabanas de 46 años que fue asesinada el 1 de septiembre de 2013 cuando estaba dando un paseo cerca de su domicilio, en la parroquia de Lavandeira. Los participantes, alrededor de 400 personas, quisieron testimoniar también su apoyo a la familia de la víctima, además de demandar que continúe la investigación y se detenga lo antes posible al o los asesinos, según señaló el alcalde, Germán Castrillón.
La concentración silenciosa, convocada por el Concello y la Asociación de Mulleres Cabanas Rural en el pabellón de Lavandeira, incluyó la lectura de manifiestos por parte de la concejala Esperanza Gayoso y de la vicepresidenta de la otra entidad convocante, a la que siguió la interpretación al piano de la melodía “Para Elisa”, de Beethoven, que corrió a cargo de una profesora de la Escuela de Música del Concello.
El regidor cabanés cerró el acto agradeciendo la alta participación, a pesar de la intensa lluvia que se registró durante toda la jornada, y reiterando el apoyo  a la familia de la fallecida –estuvieron presentes los padres, los hijos, el viudo, las hermanas y los cuñados, entre otros parientes–, en el sentido de que no están solos y para animarlos a que sigan luchando para que se esclarezca lo ocurrido.
Germán Castrillón también hizo pública su gratitud a los municipios limítrofes, que colaboraron en la búsqueda y que ayer estuvieron representados en la concentración por sus dirigentes. Tal es el caso de los alcaldes y varios concejales de Fene y A Capela, así como la práctica totalidad de la corporación de Cabanas, de la que solo faltaron tres que estaban trabajando, según indicó Germán Castrillón. n