Aunque inicialmente los tres miembros de la Comisión de Peticiones que visitaron el pasado mes de febrero la ría de Ferrol redactaron un informe de forma consensuada, el eurodiputado francés Philippe Boulland, miembro del grupo popular, ha terminado por desmarcarse del documento y emitir otro del que han desaparecido las referencias a la contaminación de la ría de Ferrol. Los otros dos miembros de la comisión, Angélica Werthmann, del grupo liberal ALDE, y Tatjana Zdanoka, de los Verdes/ALE, no han querido asumir el cambio y han presentado su propio informe alternativo.
Se trata de una situación anómala, que el BNG achacó ayer a la intención del presidente de la Comisión de Peticiones, el francés Boulland, de contentar a las autoridades y diputados del PP. La eurodiputada nacionalista Ana Miranda advirtió de que “desde logo non imos apoiar un informe descafeinado” y expresó sus esperanzas de que sea posible retomar el acuerdo inicial y aprobar un documento de consenso “con propostas concretas que contribúan ao obxectivo de completar o saneamento das rías galegas”. Tal como están ahora las cosas, señaló la representante del BNG, se respaldará el informe alternativo de Werthmann y Zdanoka.
Ana Miranda expresó su decepción al eurodiputado popular. “Esperaba máis de vostede, colega Boulland, sobre todo despois das súas declaracións ante os peticionarios e os medios de comunicación de Galicia, esperaba que liderase a elaboración dun informe a favor de dar solucións ás rías galegas”, dijo la eurodiputada, que recordó al francés su obligación de atender la petición de los ciudadanos y no la de sus compañeros de partido. Como se recordará, el documento inicial de la Comisión de Peticiones señalaba claramente que el grado de contaminación de las rías gallegas y concretamente la de Ferrol amenaza su sector marisquero y urgía a las autoridades a realizar urgentes trabajos de regeneración.
También denunció ayer Alternativa Galega de Esquerda (AGE) el cambio de criterio en el seno de la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo, achacándolo igualmente a los intereses populares. AGE subraya que el informe alternativo menciona entre otras cuestiones que la regasificadora de Mugardos no contó con un informe de impacto medioambiental adecuado y que tampoco se ajusta a las directivas europeas sobre tratamiento de residuos.
Así las cosas, la presidenta de la cámara europea concedió un plazo máximo de quince días a los integrantes de la Comisión de Peticiones para que lleguen a un acuerdo y elaboren un documento consensuado sobre el estado de las rías gallegas.