El Parlamento de Galicia rechazó, con los votos en contra del PP y el apoyo del conjunto de la oposición, una moción del BNG vinculada al desmantelamiento del conocido como tren de la costa, que une Ferrol y Ribadeo, y que solicitaba, entre otras cuestiones, la transferencia de competencias a Galicia de la línea ferroviaria de la antigua FEVE.
Al debate de esta moción parlamentaria, defendida por la diputada del BNG Olalla Rodil acudió una comitiva de la comarca, encabezada por la alcaldesa de Moeche, Beatriz Bascoy, y de la que formaron parte los concejales Tania Fernández, Mugardos, y Xesús Soto, San Sadurniño.
La diputada denunció los “retrasos continuos e suspensións do propio servicio” mientras el ejecutivo gallego permanece “de brazos cruzados”.
Por eso, Rodil justificó la presentación de una propuesta que contenía una batería de medidas para “rescatar” el antiguo FEVE y mejorar las prestaciones de la línea. Entre ellas, la “más urxente” era convocar al grupo de trabajo constituido por alcaldes de las comarcas que atraviesa la ruta, representantes de Renfe y miembros de la Consellería de Infraestructuras para analizar el ancho de vía. La diputada reclamó a la operadora Renfe la “reparación integral de todas as unidades que actualmente compoñen a flota para eliminar os problemas de fabricación”, así como dotar de suficiente de personal y medios para prestar correctamente el servicio.
Asimismo, la moción establecía un nuevo diseño de la ruta para adaptarla a las demandas del territorio y la conexión con otros medios de transporte.
La propuesta del BNG únicamente consiguió el respaldo del grupo de En Marea que, en palabras de su portavoz Marcos Cal, argumentó su necesidad para “reverter o proceso continuo de deterioro que sofre a antigua línea FEVE”. Según Cal, las autoridades están “deixando morrer” esa línea “sin que pareza que a están matando”, ya que está “más deteriorada” cada año que pasa y tiene carencias y retrasos a un “ritmo insostible para os usuarios”.
El PSdeG apoyó la toma en consideración de esta moción, aunque el diputado Raúl Fernández matizó que “os antecedentes non invitan ao optimismo”, dado que ya se han aprobado múltiples iniciativas similares con el apoyo de todos los grupos.
Por su parte, el parlamentario del PP, Martín Fernández Prado alegó que es un asunto de “clara competencia estatal” por las conexiones de este ferrocarril con otras vías de la cornisa cantábrica y aludió al compromiso adoptado por el Congreso de los Diputados para mejorar estas infraestructuras. En este sentido, recordó que “só 13 concellos teñen nomeados os seus delegados para o grupo de traballo de mellora da liña”.
El PP propuso enmendar el texto del BNG, pero la diputada nacionalista rechazó esa propuesta por considerar que anulaba el contenido de su moción.
La alcaldesa de Moeche, Beatriz Bascoy, lamentó el resultado que perjudica “ao tren que necesitamos nos nosos concellos para ir ao instituto, ao traballo, ao hospital, a facer xestións administrativas ou doutro tipo, ese tren que desaparece ou se transforma en bus ou en taxi”.
Para la primera edil modestina, “o PP votou a favor, en definitiva, de non facer nada e deixar que morra”. l