Las obras de ampliación del Arquitecto Marcide están convirtiendo el complejo en un hospital acorde al siglo XXI. Los interiores todavía necesitan más de un repaso y en eso parece que también se está trabajando. Se anuncia la renovación de camas y mesillas, algo imprescindible porque muchas de las habitaciones y las duchas requieren algo más que un lavado de cara.