El responsable local del Bloque Nacionalista Galego (BNG) en Ares, Tino Seco, visitó en los últimos días junto al edil Miguel García la zona de Montefaro, para visualizar “a situación realmente caótica no que se refire á proliferación de antenas de comunicación nesa zona”. Los nacionalistas denuncian que hay unas 15 instalaciones de ese tipo en el lugar, un problema que, advierten, se remonta décadas atrás, “cando o control sobre os efectos medioambientais e urbanísticos ―e tamén os referentes á saúde― eran praticamente inexistentes”.
El BNG sostiene que se está incumpliendo la normativa urbanística aprobada por el propio consistorio aresano en 2009, una ordenanza diseñada para regular los procedimientos de ubicación de estas construcciones. “Coma se isto fose a selva, cada empresa semella escoller o lugar que mellor lle parece, sen importarlle nada a repercusión estética ou urbanística, ou mesmo a propiedade dos terreos ou construccións nas que se ubica”, censura Seco.
El nacionalista pone el foco en la última antena colocada en Montefaro, que se corresponde, según sostiene, con una licencia solicitada en 2014 por la empresa Audiovisuais SOGAVI S.L. para instalar una torre de comunicaciones en una de las parcelas propiedad del Ministerio de Defensa –donde se sitúan las antiguas baterías militares– y que contó con un informe desfavorable por parte del arquitecto municipal.
Así las cosas, el BNG ha presentado un escrito por Registro en el Concello en el que demandan que se acredite si la obra solicitada en 2014 cumple o no con la legalidad en vigor. Exigen, también, que se informe si la antena invade terrenos de Defensa y otros de particulares y que se compruebe que la instalación cumple las medidas de seguridad.