Al igual que en la película “El Doctor Frankenstein”, el crossfit se ha convertido en ese rayo que ha conseguido revivir una disciplina de gran arraigo en la comarca, si bien “aletargada” desde la marcha de uno de sus grandes pilares y promotores, Pepe Meis, hace casi cinco años.
No sabemos si Adri López conoce –o conocerá– a Lou Ferrigno o Arnold Schwarzenegger –no pregunté y no salió ese tema durante nuestra conversación–, compartiendo largas veladas como solía contar el ya fallecido Meis, pero lo que ha logrado, de momento, el dueño de Gaman CrossFit, en Narón, es insuflar de nuevo vida a una disciplina para la que, hasta hace pocos años, Ferrol contaba con una competición internacional y con nombres en el panorama internacional como el de Alberto Díaz Mbang o Carmenza Delgado, entre otros.
La halterofilia renace en casa y lo hace de la mano, precisamente, del Club Gaman, con equipo tanto masculino como femenino y, dándole una nueva vuelta de tuerca a esta historia de cenizas y llamas con, precisamente, más chicas levantando barras y pesos, deshaciendo un estereotipo demasiado tiempo arraigado.
“Antes se veía como un deporte de hombres”, señala López, “ahora ya hay tantas chicas como chicos, incluso te diría que más. En el box de crossfit, el 70 por ciento son mujeres, entran a través de esta disciplina y después se especializan en halterofilia”. En la actualidad, López cuenta con una “plantilla” de quince halteras, siete hombres y ocho mujeres, “enviando a cada competición a seis, en función de la disponibilidad de la gente”, comenta el entrenador nacional de crossfit tras finalizar una de sus clases, “el objetivo es que participe el mayor número de gente posible”.
En los seis meses de vida de este centro, este ingeniero reconvertido y durante muchos años integrante del Atletismo Narón, quiso apostar, especialmente, por la halterofilia. “Vimos que había gente, decidimos montar un equipo y la verdad es que tuvo, y tiene, bastante aceptación”, señala López, en un día, el de hoy, en el que su centro organizará, por primera vez, la disputa de una competición del calendario autonómico, la tercera jornada de la Liga Gallega de clubes. Un auténtico sprint para este naronés –“criado a pocos metros de aquí, de este box, en la misma carretera de Freixeiro”, cuenta entre risas– que espera seguir aumentando los números de este nuevo club de la disciplina. “Tenemos a más gente entrenando”, señala, “pero todavía no tienen la licencia. Se van animando en función de los que van a competir y vamos haciéndolas”.
Un equipo de competición con sitio para todas y todos, en el que comparten “banquillo” nombres como el de Jhon Pena, de 50 años, y la benjamina del grupo, Clara Santamaría, de 23, y que hoy podrán entrar en liza en casa, junto con los más de cien levantadores que han confirmado su presencia en esta cita que tendrá lugar en el pabellón Campo da Serra desde las nueve hasta las siete de la tarde. “Lo hablamos con la Federación y ellos encantados”, comenta el director del centro, “queremos darle visibilidad, que la gente vea cómo es la competición, porque muchos piensan que es para la elite, pero puede participar mucha gente, con un poco de dominio de la técnica y que puedas hacer bien el movimiento... Vamos a ver si podemos darle un poco de vidilla a esto”.
¿Y qué hay que hacer para que una disciplina tenga una base sólida? Cuidar su semilla, su base. Y en ese aspecto también están trabajando en Gaman.
“Nos estamos centrando mucho en esto”, apunta López, “que la gente empiece desde abajo. Hay niñas y niños entrenando de 5 a 12 años, empiezan así desde pequeñitos y cuando ya tengan doce o trece, que ya tienen la técnica, empezamos a trabajar con ellos más en serio”. Una labor con la base que asimismo se podrá ver hoy en el pabellón naronés, ya que durante la celebración de la tercera cita de la Liga Galega tendrá lugar una exhibición de la más joven delegación de halteras del club. En esta, solo con barra, realizarán los movimientos olímpicos de arrancanda y dos tiempos, juzgando, precisamente, su técnica. “Tratamos de inculcar los beneficios que el entrenamiento de fuerza aporta aplicándose desde edades tempranas”, señala la entrenadora e integrante del equipo de competición Naomi Piñeiro. Un inicio que puede suponer el nacimiento de una nueva cepa de halteras en la comarca, para alegría de Meis y de todos los aficionados.
Una oficina en A Coruña, poco tiempo para entrenar y un box delante de su trabajo. Así inició López hace cinco años su camino en un cada vez más estendido mundo del crossfit. “Desde el primer momento me enganchó”, señala. Se formó, trabajó y dejó su anterior puesto para lanzarse a por todas. “Trabajo en mi hobby, es como no trabajar”, comenta entre risas, “es muy variado, siempre tienes algo que trabajar, que mejorar y es muy divertido”. Siendo estas quizá las claves de la explosión de esta disciplina en la comarca. “La verdad es que nos va bastante bien”, señala. Con crossfit, crossfit kids, gimnásticos –dominadas, anillas, flexiones...trabajando solo con el propio cuerpo–, open box –para complementar el entrenamiento–, completan un esquema que, no se cansan de señalar, es para todas las edades.