Que nadie dé nada por hecho, que nadie celebre todavía lo que está por llegar, que nadie hable demasiado antes de conocer el resultado y, sin duda, que nadie ponga en duda que mañana el Baxi Ferrol pondrá todo lo que tiene sobre la pista de A Malata –20.00 horas–. 

Diecinueve, ese número primo sólo divisible por sí mismo y por uno, son los puntos que tiene que defender el conjunto de Lino López para avanzar hacia semifinales de la Europcup. Diecinueve, una cifra indivisible e inquebrantable por el resto de cifras al igual que hasta la fecha lo ha sido el conjunto ferrolano en esta competición continental. 

Si bien para el preparador este guarismo se quedará en un cajón cuando se pite el inicio del duelo en el parquet local y sólo importará “el 200 por cien con el que llegamos a un partido de este nivel, con lo que se ha generado en la ciudad, el ambiente que se va a vivir en el pabellón... si no llegásemos así no nos dedicaríamos a jugar al baloncesto”, así como el cero cansancio y la táctica. 

“Tienes que salir motivado y saber que es un acontecimiento histórico para todos”, señala de nuevo un preparador local que con sus pupilas reescribe cada mes la historia del baloncesto de la comarca.

La felicidad de una ciudad

Un nuevo capítulo de una historia que en esta ocasión comenzó hace una semana en Cerdeña y que aquí en A Malata vivirá su continuación con 40 minutos más. Otra cifra a anotar en la libreta azul del Baxi. 

Esos que conforman esa segunda mitad del gran duelo ante el Dinamo Sassari y que ahora tendrán a la entregada afición ferrolana como testigo. “Son partidos de 80 minutos”, repetía de nuevo López, “ahora llevamos una ventaja en el descanso, nos queda el segundo tiempo, en el que tenemos que estar a un nivel muy alto como se vio. Hasta los últimos cinco minutos íbamos igualados, e incluso perdiendo y fuimos capaces de sacar ventaja, pero el partido no va acorde con el resultado final”. 

López no tiene dudas de la dificultad que entraña el encuentro a pesar de esos diecinueve puntos de renta, ni tampoco las tiene sobre su equipo para hacer frente a él. “Estoy tranquilo, el equipo está concentrado en lo que tiene que estar. El entorno genera una ilusión que es normal que se contagie”, cuenta López que tira de hemeroteca para demostrar de lo que son capaces sus jugadoras. “Lo hemos demostrado en otras eliminatorias, cuando ganamos ante las belgas, lo mismo con el Battipaglia... el equipo es muy competitivo. No estoy preocupado, luego te pueden salir mejor o peor las cosas”. 

El Baxi está enfocado en “cada jugada, en cada acción, incluso en las acciones cuando estamos en el banquillo. No hay que pensar en el resultado, hay que pensar en las acciones que tenemos que hacer”, sentencia López que, hasta la fecha, ha acertado con la temperatura a la que cocinar a su formación para lograr una exitosa receta continental. 

Unas cantidades en las que, sin duda, las cifras que se manejarán esta tarde en A Malata serán imprescindibles e impresionantes. Y es que, que nadie dude tampoco de que “el mayor logro del equipo es salir a la calle y ver el ambiente que se vive, te paran, para sacar fotos, a felicitarte... La felicidad que se vive en la ciudad”, señala un técnico que apuesta por una afición que, sin duda, seguirá llevando a las suyas en volandas, sin pedir más cifras a cambio que las de la entrega y trabajo.