El Racing afrontó su penúltimo duelo de la primera vuelta todavía con la gasolina que le quedaba tras la gran victoria firmada ante el Sporting de Gijón. Y lo hizo ante un Almería que durante buena parte de este primer tiempo se vio maniatado por los de Cristóbal Parralo, en muchos momentos con muy pocas diferencias para saber quién era el grupo que ocupaba la segunda posición y quién la antepenúltima. La banda derecha de Álex Pozo se convirtió en el camino de los de Rubi hacia el campo verde, mientras los ferrolanos lo intentaron tanto por el carril de Nacho como por el de Dorrío.
En los primeros minutos, precisamente Pozo en las filas almerienses fue el encargado de avisar, con un centro al que no consiguió llegar ninguno de sus compañeros, mientras que Puric protagonizó un tímido remate tras una falta lateral lanzada por Señé. La conexión entre Álvaro Giménez y un Nacho que está disfrutando de sus mejores momentos con la camiseta verde, se dejó ver cuando todavía no se había cumplido el minuto 10, con Sánchez posteriormente provocando el primer córner racinguista.
Los ferrolanos encerraban a los andaluces en su campo, si bien el grupo visitante dio un pequeño zarpazo con la garra del pichichi de la categoría, Luis Suárez, salvando Naldo tras la carrera en solitario del colombiano. En el nuevo ataque coral que ponía en escena el grupo ferrolano, salió a escena Gelardo con tiro lejano y cuando Rubi tenía que cambiar de manera muy tempranera sus planes con el cambio de Baptistão por Nico Melamed, mientras que en las filas verdes un David Castro al que no se le veía nada cómodo en este duelo en casa vio la quinta amarilla –el de Cuntis abandonaría poco después el terreno de juego por Rober Correa–.
Y si bien las llegadas ferrolanas eran mucho más habituales que en otros partidos, el peligro no terminaba de cuajar. Lo volvió a intentar Álvaro Giménez con un control tambaleante cuando comenzaba a llover en una A Malata que de nuevo respondió. Y justo cuando más estaba arrinconando el Racing al segundo clasificado, Suárez demostró el porqué de su liderato. Sólo le hizo falta una clara llegada al colombiano para, con bicicleta incluida, batir a Jesús Ruiz (min. 33) y hacer su decimotercer gol en un campo ferrolano.
El Racing se enjugó la lluvia y siguió haciendo su juego, llamar y llamar a la puerta del gol, con llegadas al área andaluza. Con lanzamientos desde la frontal de Nacho y por el lateral de Dorrío, el Racing se marchó con un castigo excesivo ante un Almería menos protagonista pero, eso sí, mucho más efectivo y ya con puerta automática hacia el gol.
Y tanto fue a la fuente almeriense el Racing que, encontró, lo que al final sería, una pepita de oro en comparación con el tesoro hallado por el Almería escarbando en el césped ferrolano. Dorrío entregó un excepcional balón a un Gelardo que no dudó y, enganchando la pelota en el borde de área marcó uno de los mejores goles, con un tiro por alto con el que A Malata volvió a oler a esperanza.
Si bien este aroma duró exactamente un minuto lo que tardó, de nuevo, Luis Suárez en anotar el penalti cometido por Buñuel (1-2) en el minuto 50. Estas dos dianas prendieron la mecha de los de Rubi, ya entonados y con agallas, no sólo para acostumbrase al chaparrón que caía en Ferrol. Los andaluces respiraban todo el oxígeno de la inundada Malata y en estas inhalaciones llegó el tercero visitante, en esta ocasión de Arribas, eso sí, tras una asistencia ¿de quién? De Luis Suárez (1-3), en el minuto 56.
El peligro del Almería ya era constante en cada una de sus zambullidas al área ferrolana y en otra de estas, aprovechando un primer resbalón de Naldo, remató el colombiano de los 40 millones de euros la travesía en las aguas de la ciudad naval, a pesar de que Jesús Ruiz llegase a tocar (1-4), en el 63. Parralo movió ficha con Jauregi, Álex y Bebé, un repostaje que funcionó, al menos, para inquietar a un Almería que si en la vanguardia tenía a Suárez en la meta tenía a Maxi.
Una falta de Bebé y varios desmarques de Jauregi fueron la últimas brazadas del año en casa de un Racing que, a pesar de la abultada derrota, mereció mucho más ante un Almería al que llevó a puerto su calidad individual.
Racing de Ferrol: Jesús Ruiz, Puric, Naldo, Álvaro Sanz, Josep Señé (Álex López, min. 67), Nacho (Bebé,min. 67), Aitor Gelardo (David Carballo, min. 75), David Castro (Rober Correa, min. 31), Dorrío, Álvaro Giménez (Jauregi, min. 67) y Aitor Buñuel.
Banquillo: Bernad, Yoel (porteros suplentes), Delmás, Rober Correa, Chiki, Álex López, Jauregi, Bebé, Manu Vallejo, Luis Perea y David Carballo.
UD Almería: Maxi, Edgar, Kaiky, Lopy, Melero (Quintanilla,min. 74), Luis Suárez (Marezi, min. 74), Arribas (Rachad, min. 83), Baptistão (Nico, mi. 15), Álex Pozo (Puigmal, min. 83), Marc Pubill y Centelles..
Banquillo:Bruno Iribarne (portero suplente), Arnau, Nico, Radovanovic, Marezi, Bruno Langa, Rachard, Quintanilla y Perovic.
Goles: 0-1, min. 33: Luis Suárez; 1-1, min. 48: Gelardo; 1-2, min. 50: Luis Suárez, de penalti; 1-3, min. 56: Arribas; 1-4, min. 63: Luis Suárez.
Árbitro: González Esteban (colegio vasco).
Asistentes: Pérez de Colosia Alonso (colegio valenciano) y Moleón Cuenca (colegio navarro).
Cuarto árbitro: Irurtzun Artola (colegio murciano)
Tarjetas amarillas: Racing Club Ferrol: David Castro (min. 16), Josep Señé (min. 24), Naldo (min. 26) UD Almería: Quintanilla (min. 77).