Duelo de personalidades el que mañana al mediodía se pondrá en juego en el césped de El Molinón –14.00 horas–. Una, la del local Sporting, muy marcada por el sello de técnico vigués Rubén Albés y que quiere volver a traer al frente tras el duro traspié sufrido el pasado fin de semana ante el colista Cartagena, una derrota por la mínima y de penalti que dolió mucho en las filas sportinguistas.
En el otro lado, un Racing de Parralo que todavía no ha encontrado su personalidad, su esencia, su camino y que en cada encuentro ofrece una versión, en ocasiones abriendo la puerta a la esperanza y, en otras, al pozo. En este se quedó el grupo verde el pasado fin de semana ante los también asturianos del Oviedo, una cara que quiere lavarse cuanto antes mejor el conjunto ferrolano, frotándose bien los ojos para encontrar finalmente tanto el camino del triunfo como el de la estabilidad –de juego, sensaciones, goles, resultados...–.
Y si en duelos previos era, precisamente, en encuentro ante rivales de la parte alta contra los que el grupo de Parralo mostraba alguna de sus mejores versiones, enfrente tendrá a un Sporting al que, en ocasiones, se le atragantan los grupos a los que tiene que buscar en la parte baja, caso del Cartagena como ejemplo más reciente y, echando la vista atrás –y abajo– firmando tablas con el Eldense, Tenerife y un Dépor en pleno despegue. Y con esta clara obligación de ganar locales y visitantes saltarán a un, se espera, Molinón con una gran entrada, esperando unos y otros encontrar esencia y suerte, a partes iguales, y que, en el caso, ferrolano poco o nada ha acompañado a los de Parralo en esta primera vuelta.
“El Sporting tiene una clara idea de juego, con buenos jugadores que hacen buenos desmarques, de ruptura”, analizaba Parralo, “con gente con experiencia atrás, muy compacto y de ideas claras”. Y esas, precisamente, son las que quiere encontrar el Racing, y si es ante los asturianos mejor. Y es que, como bien señalaba el preparador “vamos a afrontar el partido con nuestras armas, nuestra manera de jugar, nuestro criterio e intentar controlar esas situaciones que ellos hacen muy bien. Pero una cosas es el planteamiento y luego el juego que se desarrolla”.
Parralo llegará a El Molinón con un Albés alabando a su equipo –”proponen más con balón, con mucha movilidad, es un equipo atrevido y valiente”– y asimismo al técnico local, especialmente su trabajo para llegar a donde está ahora. “Creo ha sido magnífico en los últimos años y, si yo fuera directivo del Racing, tendría crédito infinito”, añadía. Ahora sólo falta comenzar a sumar, simplemente una cantidad finita, pero suficiente, de puntos.