El patrullero de altura “Atalaya” se encuentra en el mar en una operación de vigilancia y seguridad marítima en espacios de interés nacional. Durante este despliegue realizará presencia naval por la zona económica exclusiva, la costa peninsular mediterránea, el estrecho de Gibraltar y la isla de Alborán.
Como es habitual en estas misiones, tendrá también asignadas labores de protección del patrimonio arqueológico sumergido y control de la pesca en aguas españolas, en coordinación con el Centro de Operaciones y Vigilancia de Acción Marítima de la Armada.
El “Atalaya” también actuará como apoyo asociado en la operación “Sea Guardian”, de la OTAN, cuya misión, informan desde Defensa, “es el control y la protección de las líneas marítimas de comunicación más importantes de la zona, así como evitar tráficos y actividades ilícitas”.
Esta salida se realiza dentro de las operaciones de presencia, vigilancia y disuasión de las Fuerzas Armadas, con el buque integrado en el Mando Operativo Marítimo y bajo control operativo del Mando de Operaciones.
El patrullero tiene como cometido la protección de los intereses marítimos de soberanía e interés nacional. También asegura la cooperación permanente con los organismos de la Administración con competencias en el ámbito marítimo. Se considera “una unidad esencial debido a sus capacidades para contribuir en las acciones requeridas por el Estado en el mar.