Los comités de empresa de los dos centros de trabajo de Navantia en la ría de Ferrol denunciaron ayer que las administraciones central y autonómica han dejado “á deriva” a la empresa naval, lo que se traduce, afirman, en “dar as costas” a la ciudad y su entorno.
En una rueda de prensa conjunta en la que participaron representantes de todas las centrales sindicales con presencia en las factorías y también de las industrias auxiliares, los organismos plantearon sus reivindicaciones para este nuevo mandato. Así, a poco más de un mes de los comicios gallegos, la parte social exigió “compromisos” a la Xunta y el Gobierno central que no se queden en meras promesas electorales.
De este modo, el nuevo presidente del comité de empresa de Ferrol, Juan Carlos Díaz (MAS), señaló que las propuestas de los sindicatos establecen “por onde debería transitar o futuro da compañía”, girando en torno a tres pilares: la carga de trabajo, las inversiones y la adecuación de las plantillas. Estas reivindicaciones, señaló el representante, marcan “un punto de arranque” de la actividad sindical coincidiendo con el inicio del período electoral.
Comenzando por las propuestas en torno a la carga de trabajo, los sindicatos piden que se amplíe el programa de las F-110 con más barcos, así como “dar orden de execución dun buque AOR”, asegurando que la Armada tiene intención de “xubilar” el “Patiño”. De igual modo, la parte social instó al Gobierno central a redoblar sus esfuerzos comerciales para que llegue a buen puerto la propuesta de construcción de varias corbetas y destructores para Australia.
En el caso de la fábrica de Turbinas, los comités de empresa, recordando el acuerdo alcanzado en 2022 con Repsol para el desarrollo de electrolizadores, piden que se apueste con decisión por el negocio del hidrógeno. Por último, Díaz señaló que en el área de Reparaciones las instalaciones de Ferrol son “especialistas” a nivel internacional, especialmente de gaseros, pero que al mismo tiempo los proyectos de adaptación y modernización de buques están muy cotizados, por lo que la parte social considera que son dos mercados en los que hay que apostar sin que uno quite recursos al otro.
Respecto a las inversiones, los comités reiteran la necesidad de continuar con el proyecto de modernización de los astilleros y no limitarlo a la fábrica de subbloques, actualmente en construcción.
En este sentido, la parte social insistió en que es imperante contar tanto con el demandado dique cubierto –dado que, señalan, agilizaría los plazos de construcción, lo que permitiría ser más competitivos–, como uno nuevo en el área de Reparaciones. Este último, apuntaron desde el comité, resulta necesario porque a día de hoy las instalaciones no pueden atender la gran demanda del mercado –asegurando que en los últimos años se tuvieron que desviar o directamente rechazar 60 navíos–, además de que es demasiado pequeño para algunos de los buques actualmente en operación. Asimismo, esta sección de los astilleros también precisa de inversiones para su modernización, poniendo como ejemplo el comité nuevas estaciones de pintado o grúas.
En cuanto a los fondos para acometer estas obras, la parte social recordó que el antiguo conselleiro de Industria, Francisco Conde, planteó una fórmula mixta con participación de empresas privadas; una propuesta que los sindicatos consideraron pero que finalmente no se volvió a tratar.
El último eje tratado durante la rueda de prensa fue la adecuación de las plantillas.
En este tema, los comités de empresa exigen una auténtica renovación generacional y una apuesta firme por el empleo. Como dato relevante, los organismos detallaron que, pese a lo que se transmite desde la empresa, a día de hoy la capacidad de los astilleros –en términos constructivos– está al 25%.