Las intensas precipitaciones caídas en Galicia durante los últimos días ha mejorado las expectativas en cuanto al estado de ríos y embalses, después de un verano extraordinariamente seco. La Xunta considera que lo peor ya ha pasado y constata un incremento del 800% en el caudal de los cauces fluviales. Tras la reunión de la Oficina Técnica da Seca celebrada ayer se ha tomado la decisión de desactivar la declaración de sequía prolongada en la Mariña, así como en el Ortegal y Cedeira. Estos territorios pasan a una situación de normalidad. Para el resto de los sistemas de la demarcación hidrográfica Galicia-Norte se esperará todavía a que se consoliden estos buenos datos.
No todos los ríos y embalses se recuperan con la misma rapidez. El de As Forcadas, que abastece a la ría de Ferrol, gana volumen tras las lluvias y llega al 65% de ocupación, tras haber alcanzado su punto más bajo a principios de octubre, con un 57% de ocupación el día 3 de ese mes. En la actualidad almacena 6,43 hectómetros cúbicos de 9,89 posibles. Las cifras están en línea con la media de la demarcación hidrográfica en cuanto a las masas de agua destinadas al abastecimiento de la población, que es también del 65%, según los datos recopilados por Augas de Galicia el 7 de noviembre.
Los otros dos embalses de la zona, ambos en As Pontes, están destinados a un uso hidroeléctrico e industrial. El del Eume, el segundo de mayor tamaño de la demarcación Galicia-Costa (123 hectómetros cúbicos si está lleno), estaba este lunes a un 78% de capacidad. El de A Ribeira (32,80 Hm3), se encontraba al 18%.