La urbe naval cuenta, en relación con el total de sus habitantes, con el porcentaje de población extranjera más bajo de las siete grandes ciudades de Galicia. Este es uno de los datos que muestra el último informe migratorio del Instituto Galego de Estatística (IGE), publicado hace escasos días y que consta, según el apartado, con los datos actualizados para las anualidades 2022 y 2023.
Así, tal y como muestra el documento, la estadística del año pasado refleja que el 4,5% de los vecinos de Ferrol nacieron fuera del territorio nacional –curiosamente en un porcentaje idéntico entre hombres y mujeres, del 4,5%–, siendo la urbe más cercana Pontevedra, con un 4,9 –4,8 varones y 5% mujeres–. En el extremo opuesto se situaría A Coruña, con un 7,6% y Lugo y Ourense, con un 7,5 cada una.
No obstante, al igual que en caso de los análisis sobre el desempleo por municipios, es importante tener en cuenta el impacto de la densidad poblacional a la hora de interpretar el porcentaje, de forma que cuanto más reducido sea el total, mayor será la cifra resultante, en este caso de vecinos de nacionalidad extranjera. De esta forma, Ferrol no es el concello del conjunto de las tres comarcas con un mayor número de habitantes foráneos en relación a su total, sino que se situaría en la quinta posición de los 20 ayuntamientos que componen Ferrolterra. Por delante de la ciudad naval, de este modo, se situarían Cedeira (6,4%), Cariño (6,3), Cerdido (5,4) y Ortigueira (4,66). Narón, el segundo municipio con mayor densidad poblacional del territorio, contaría con un 3,3% de su población de origen extranjero.
Otro dato interesante que se encuentra en el documento, en este caso referido al año 2022, es la gran disparidad que se halla entre el saldo migratorio interior y exterior. Este concepto refleja la diferencia entre el total de emigrantes e inmigrantes respecto a toda la población de un territorio, siendo el interior el de movimientos de personas dentro de la propia Galicia y el exterior el de vecinos del resto de España y el extranjero.
Por comarcas, el saldo total de los tres territorios desde 2018 ha sido positivo salvo en el caso de Ortegal en el mencionado año y el siguiente. Sin embargo, la tendencia de los últimos años en toda Ferrolterra es de caída del interior –con la excepción de Ferrol en 2020, posiblemente incentivado por los movimientos poblacionales derivados de la pandemia de coronavirus, y el Eume en 2019 y 2020–. El exterior, por el contrario, fue positivo en las tres comarcas a lo largo de los cinco ejercicios.
Centrándonos en 2022, el último año con datos disponibles, en los municipios que componen el área de Ferrol el saldo total fue de 1.107 personas, con una caída de 115 en el saldo interior y un incremento de 1.222 en el exterior. Ortegal, por su parte, registró un resultado conjunto de 177 habitantes más, dentro de los cuales se situaría un descenso de 86 en los movimientos en el territorio gallego y un aumento de 263 de fuera de la Comunidad. En el caso del Eume, el total es de 25 personas, con un desplome de 98 en el saldo interior y un crecimiento de 123 en el exterior.
A nivel municipal, la ciudad naval es el concello que cuenta con el balance total más alto, con 426 personas –con una caída de 310 en el saldo interior y un incremento de 736 en el exterior–, seguida de Narón, con 364 (+80, +284); Ares, con 151 (+99, +52); Cariño, con 125 (-8, +133) y Ortiggueira, con 67 (-49, +116). En el extremo opuesto se encontraría A Capela, con un saldo negativo de 23 habitantes –con una caída de 33 en el interior y un incremento de 10 en el exterior–; As Pontes, con un descenso de 21 (-62, +41); Mañón, con una bajada de 9 (-15, +6); Cedeira, con una caída de 8 personas (-42, +34) y Cerdido, que reduce su total en 6 habitantes (-14, +8).
Como se puede observar, en todos los casos el saldo exterior se mantiene positivo –de hecho es así en todos los municipios de las tres comarcas–, lo que se traduce en un descenso generalizado en el flujo migratorio dentro del territorio gallego que, salvo en estos cinco últimos ayuntamientos, no ha logrado afectar al incremento registrado fuera de la Comunidad.
Otra serie de datos interesantes que se muestran en el documento son las tasas brutas de emigración e inmigración, es decir, las entradas y salidas de personas por cada 1.000 habitantes. Tal y como detalla en el informe, en el caso de Galicia la segunda lleva superando a la primera desde 2016 tras un período de tres años –de 2013 a 2015 en plena crisis económica– en el que el saldo migratorio fue negativo.
Así, según las tablas de datos por territorios, en los últimos cinco años esta tendencia se ha dado en las tres comarcas de Ferrolterra con excepción de Ortegal, donde en 2018 y 2019 la tasa bruta de emigración fue más alta que la de inmigración. En Ferrol, la diferencia entre ambos flujos es relativamente reducida en todo el período salvo en 2022, donde la inmigración se acelera. De este modo, se observa que el volumen de salidas del territorio fue de 21,3 personas por cada 1.000 habitantes en 2018, de 21,5 en 2019, 18 en 2020 y 23,2 en 2021 y 2022, mientras que el de entrada fue de 23, 24,4, 23,3, 26,5 y 30,5, respectivamente.
En el Eume la tendencia fue idéntica a la de Ferrol –aunque con cifras algo más altas, dado el volumen poblacional del área–, siendo las tasas de emigración, siguiendo el orden anual anterior, de 23,6, 23,8, 21,4, 30,4 y 32,4, mientras que las de inmigración fueron de 24,9, 27,2, 26,4, 32,1 y 33,5 personas por cada 1.000 habitantes. En el caso de Ortegal, como se había mencionado, los años 2018 y 2019 tuvieron un saldo negativo –es decir, con más salidas de población que entradas–, con una tasa de emigración de 31 y 25,1 frente a las de inmigración 23,6 y 24,3. Como dato curioso, esta comarca registró en 2022 el saldo de entrada más grande de todo Ferrolterra en los últimos cinco años –46,9 personas por cada 1.000 habitantes–.
Finalmente, a nivel municipal el concello de Ares fue el que contó el pasado 2022 con la tasa bruta de inmigración más alta de toda Ferrolterra, con un 67,6, mientras que A Capela, con 51,3, hizo lo propio en el apartado de emigración.