Hace cincuenta años, la Casa da Matanza, en Padrón, en la que Rosalía de Castro vivió los últimos años de su vida, conseguía convertirse en museo, en pleno franquismo, gracias a la colaboración de miles de personas y entidades de toda Galicia y de la emigración que contribuyeron con sus aportaciones económicas a la compra, restauración y musealización del inmueble.
En la zona de Ferrolterra, apoyaron el proyecto, entre otros, entidades como la SCRD Canido, además de muchos particulares y concellos como Fene, A Capela, Ares, As Pontes y Mugardos. La historia del museo puede verse en la Praza da Constitución de Ferrol, donde ayer fue inaugurada la exposición “A Casa de Galicia. 50 anos da Casa de Rosalía”, comisariada por Pepe Barro, autor también de la museología del espacio localizado en Padrón. El presidente de la Fundación Rosalía, Anxo Angueira; la concejala de Normalización Lingüística, Cristina Prados; y la diputada de la Diputación de Coruña, María Muíño, tomaron parte en el acto de inauguración de la exposición, que permanecerá en la ciudad naval hasta el próximo 3 de mayo. La misma hace un repaso por la historia de esta Casa-Museo, abierta al público el 15 de julio de 1971.
El Patronato Rosalía, creado en 1947, se convirtió en un refugio del galleguismo, con actos como la Misa de Rosalía en Bonaval, que eran auténticos encuentros de afirmación galleguista. “Nin sequera o franquismo puido facerlle fronte á vontade popular de recuperar esta Casa”, indican desde la Fundación.
Entonces, participaron cientos de personas anónimas de Galicia a partir de la propuesta de José Manuel Rey de Viana, organizándose colectas en muchas villas y en casi todos los centros gallegos en la emigración, se unieron más de 70 concellos, varios bancos, equipos de fútbol e innumerables asociaciones de toda la comunidad. La muestra está patrocinada por la Xunta de Galicia y la Diputación da Coruña.
La Casa da Matanza abrió al público el 15 de julio de 1971, pero no fue hasta el siguiente año cuando fue musealizada a partir del proyecto realizado por Xosé Filgueira Valverde. Es por ello que las celebraciones y actividades de este 50 aniversario durarán un año, hasta el próximo julio.