La denuncia del colectivo de presos políticos de la dictadura ante la Fiscalía de Galicia por el incumplimiento de la Ley de Memoria Histórica por parte del Ministerio de Defensa se dirimirá en el Tribunal Supremo. La Fiscalía de Galicia archiva las diligencias y las remite, por inhibición, a la Fiscalía del Supremo, por ser la competente.
La denuncia enumera calles del Arsenal y símbolos que, según la documentación de los presos políticos, deben ser retirados. En la memoria justificativa recuerdan todos los pasos dados ante diferentes administraciones, las alternativas ofrecidas y la persistencia en mantener en Galicia nombres de calles, escudos y cruces conmemorativas que rinden homenaje a personalidades de la dictadura o que se destacaron en la Guerra Civil (en el caso del Crucero Baleares, por su participación en el bombardeo desde el mar de la población que huía de Málaga a Almería en lo que se conoce como “la Desbandá” y en la que se calcula que pudieron morir entre 3.000 y 5.000 civiles).
Solicitan que se tomen las medidas oportunas para comprobar los datos que aportan, tanto en Galicia como en el resto del Estado, y que se actúe en consecuencia porque “entendemos que esta reiterada actitude de incumprimento da lei polo Ministerio de Defensa podería ser constitutiva de delito”.
El documento está apoyado por quince presos políticos de la dictadura: Rafael Pillado Lista, Francisco Rodríguez Sánchez, Sari Alabau Albors, Vicente Couce Ferreira, Raúl Pillado Lista, Alfonso Tellado Sande, Antón Martínez Aneiros, Xosé Piñeiro Arnoso, Anxo Ferreiro Currás, Ignacio Fernández Toxo, Fina Varela Fontán, José María Freire Piñeiro, José Loureiro Fernández, Manuel Monge González y Ricardo Aneiros Sixto.
El documento señala simbología franquista en Ferrol, A Coruña y Santiago. En el caso ferrolano, en el Arsenal, se refiere a las calles Almirante Fernández Martín, Almirante Vierna, González Llanos, Salvador Moreno, Marqués de Alborán, Soldado Lois, Crucero Baleares, Cándido Pérez y Almirante Honorio Cornejo. Recuerdan que el pleno del Concello de Ferrol retiró los nombres que los recordaban en la ciudad, en algunos casos ya en 1981.
También incluyen un escudo franquista en el Sánchez Aguilera y, en la iglesia de San Francisco, una cruz de los caídos, una placa al Crucero Baleares y otra del bautismo del “Generalísimo”.