No ha sido el mayo más caluroso pero este mes en el que “a vella aínda queima o tallo”, ha sido especialmente seco, tras haberse registrado tan solo ocho jornadas en las que se produjeron chuvascos. Eso sí, el mes de las flores se despidió con lluvias tras azotar Galicia una borrasca que dejó precipitaciones en toda la comunidad los últimos días de mayo y en las primeras jornadas de junio. Cabe precisar que de esos días con lluvia solo se contabilizaron 0,7; 0,6; 1,2; 2,4; 5,7; 2,1 y 10 litros (día 31) por metro cuadrado. No obstante, el 22 mayo fue la jornada más lluviosa del mes, habiendo caído 14,8 litros en total.
La temperatura media del mes ha sido de 18,33 grados, lo que desde Meteogalicia consideran una temperatura primaveral. Asimismo, la media de las altas se situó en 21,22º. De los 31 días del mes, en 17 jornadas se superaron los 20 grados siendo el día más cálido el 14, cuando el mercurio ascendió hasta los 29,7 grados. La mínima registrada se corresponde con el día 2, cuando el termómetro cayó hasta los 15,6 grados.
Tras un mes de abril propiamente primaveral, en el que se ha disfrutado de algún día para dar paseos por la playa, o incluso de pasar la jornada disfrutando del sol en los arenales, las temperaturas medias han sido relativamente suaves, con no más de 17 grados y un nivel de precipitaciones más bajo que de costumbre (en el último lustro las precipitaciones de este mes fluctúan entre los 141 litros de 2020 a los 61 de 2022). Mayo, en cambio, sí que ha sido un mes más veraniego, ya que no han sido pocas las jornadas en las que se han superado los veinte grados, aproximándose el mercurio a los treinta en más de una ocasión, lo que ha propiciado estampas veraniegas, con permiso, eso sí, del viento, que en ocasiones tocó esquivar pues vino de la mano del anticiclón y obligó a buscar playas más resguardadas como las de la ría, en Cabanas, Ares o Caranza.
En resumen, mayo no ha sido un mes frío ni tampoco lluvioso, más bien lo contrario, pero tampoco lo está siendo 2022. Así, desde que comenzó el año se recogieron 66,1 litros en enero; 57,4 en febrero; 122,7 en marzo; 61,1 en abril y menos de 30 en mayo. El mes de marzo ha sido el más lluvioso hasta la fecha. Mientras que si analizamos la pluviometría de los últimos cuatro ejercicios, en 2019 noviembre fue el mes con más lluvia (372,8 litros); en 2020 se recogieron más litros en diciembre, con 283; en 2021, en cambio, fue febrero el mes que más llovió, con 223,5 litros.
Junio en cambio parece haber empezado con mayor inestabilidad y encarrilando días de lluvia consecutivos, algo que apenas sucedió en el mes de mayo, que pasará a engrosar la lista de los menos lluviosos de la historia.