La delegada de la Xunta en Ferrol,  Martina Aneiros, visitó ayer las instalaciones de la antigua Casa del Mar, donde se ubicará el primer albergue público de Ferrol, en lo que es el kilómetro cero del Camino Inglés.

Los trabajos avanzan ahora con la división de espacios con paneles de pladur y con colocación de las instalaciones eléctrica y de fontanería.

Ya comienza a perfilarse la fisonomía que tendrá el albergue, que, aunque no podrá ser inaugurado en el segundo año xacobeo, sí estará operativo para el próximo, toda vez que se espera que los trabajos concluyan a principios de 2023.

Las obras cuentan con un presupuesto de 467.000 euros, aportados desde Turismo de Galicia de la Xunta, y permitirán habilitar 60 plazas para peregrinos –dos de ellas adaptadas para personas con movilidad reducida–. En la planta inferior se dispone el acceso, la sala común y la oficina, mientras que en la planta superior estarán ubicados los dormitorios y los aseos.

Aneiros destacó ayer en su visita la importancia de esta nueva infraestructura para la ciudad en tanto que “Ferrol é un símbolo do Camiño Inglés xa que era por Ferrol por onde chegaban por mar peregrinos do norte de Europa e das illas británicas, para comezar aquí e rematar en Santiago”.

Aneiros recordó que el albergue forma parte del compromiso en el Pacto do Estado por Ferrol y con este se alcanzarían los siete en la red pública del Camino Inglés, que ha experimentado en los últimos años un incremento del 25% de peregrinos y es la cuarta más transitada, recordó la delegada de la Xunta.