Un año más la costa ferrolana destaca por contar con nada menos que cuatro playas con el distintivo de Bandera Azul que otorga la Asociación de Educación Ambiental y del Cosumidor –Aedac– a aquellos arenales seleccionados en base a una serie de criterios de sostenibilidad, accesibilidad y servicios que ofrece.

En el municipio ferrolano repiten otro año más las playas ya consolidadas de A Fragata- O Pareixal, en Covas; Doniños, Esmelle y San Xurxo. La novedad radica en la concesión, por primera vez, de una Bandera Azul a una playa de interior, la de la ría ferrolana, la de Caranza, una apuesta que se anunció ya con la concesión de los galardones del año pasado y que ha resultado ganadora.

La concejala del área de Servizos, Ana Lamas, se mostraba ayer orgullosa de esta valoración y calificó de “boa nova” esta designación, tanto para el Concello, que fue el que presentó la propuesta, como para los vecinos de Caranza que contarán este año con un aliciente más para promocionar su playa.

La edila recordó que este era uno de los objetivos, el de “mellorar o estado dos nosos areais e, por suposto, aumentar o número de distintivos”. 
Que estas playas están incluidas en las redes de Bandera Azul implica, explicó la concejala, “unha serie de cuestións que temos que cumprir para ter o distintivo” por eso para conseguir ese “perfecto estado de mantemento” es necesario realizar una serie de inversiones.

En el caso de Caranza, indicó, “somos conscientes de que todavía ten un percorrido que facer para dotala de máis calidade e servizos pero é unha boa nova e moi bo punto de partida para mellorar no so o arenal de Caranza senón a totalidade dos nosos arenais”.

Las playas ferrolanas serán este verano las únicas en las que ondeen estas banderas, ya que ninguno de los concellos de la comarca tiene el galardón, como ya sucedió en la temporada pasada. Los requisitos exigidos y las dificultades de muchos para cumplirlos–entre ellos el problema surgido en los últimos años con la escasez de socorristas en los arenales– han hecho que cada vez sean menos los municipios  que opten a conseguir este reconocimiento.

En el caso de Caranza, ya el año pasado se pusieron en marcha una serie de actuaciones como la reparación de toda la pasarela de acceso al arenal así como la barandilla, con el fin de mejorar la seguridad y accesibilidad a la zona de la playa.
Más allá de la cabecera de comarca, la única Bandera Azul que existe en la comarca es la playa artificial del lago de As Pontes, creado en espacios de la antigua mina.

Una playa en el lago

En este caso es la tercera vez que consigue este reconocimiento. Desde el Concello se apunta que para revalidar este distintivo se envió en el mes de noviembre una memoria de las actividades llevadas a cabo durante el año, tanto en el ámbito ambiental como en el educativo, en el de la accesibildiad y de la seguridad, así como una propuesta de candidatura para este año, con acciones de mejora de infraestructuras y servicios, así como en la puesta en valor de la diversidad.