Las periodistas iraníes Nilufar Hamedi y Elahe Mohammadi son las ganadoras de la vigésima edición del Premio José Couso a la libertad de prensa, que otorga el Colexio de Xornalistas y el Club de Prensa de Ferrol a través de las votaciones de sus miembros. El fallo se anunciaba este viernes en el consistorio ferrolano, avanzando que las profesionales no podrán recibir el galardón ni siquiera en la distancia, precisamente, porque están envueltas en un proceso judicial en su país que les impide entrar en contacto con el extranjero.
El alcalde de Ferrol, José Manuel Rey Varela, presidió la lectura del fallo en el Salón de Recepciones. Un acto que contó con la presencia del decano del Colexio, Paco Sarria; la presidenta del Club de Prensa, Julia Díaz, y el secretario de la entidad colegial, Darío Janeiro, además de concejales de la corporación ferrolana. Valorando que se cumple un año más con el "compromiso" que adquirieron ambas entidades con la figura de Couso, y trasladando además que el periodismo español combate ahora la autocensura y también la irrupción de los pseudomedios, se procedió a la lectura del acta que recoge la voluntad del más de centenar de votos, de los que dio fe un notario, como es habitual.
Janeiro fue quien hizo la lectura, recordando que este es un premio "de xornalistas para xornalistas" y dando las atroces cifras de periodistas asesinados: 48 en 2023 y 11 en lo que va de año, el 50% en Palestina. "En Gaza estase a exercer un xornalismo heroico", apuntó el secretario. Hizo hincapié también en el contexto de Ucrania, donde "os profesionais sofren situacións extremas", recordando en este punto a otro de los candidatos al Couso que finalmente no resultó escogido en la votación, Pablo González, detenido en febrero de 2022 por las autoridades polacas y sin derecho a un proceso judicial justo.
Considera Janeiro el Premio Couso como un "observatorio permanente" sobre la falta de libertad de prensa a nivel internacional, repasando los méritos de las cuatro candidaturas que optaban este año al galardón, y apreciando que las ganadoras "corren perigo se están en contacto con organizacións do exterior de Irán". Rey Varela fue el encargado de cerrar el acto reiterando que es un "placer" para Ferrol acoger de nuevo el anuncio del fallo y la ceremonia de entrega, recordando "ao noso veciño José, asasinado exercendo a súa profesión", dijo, comprometiendo el respaldo del Concello.
"Desgraciadamente, o caso de Couso non é unha anomalía, un feito illado, senón que engrosa unha extensa lista de informadores que pagaron co seu ben máis preciado, que é a súa vida, desempeñar a súa profesión, a súa vocación", apreció el regidor, reflexionando que "co paso dos anos non acabamos de aprender dos horrores do pasado". Haciendo un reconocimiento a todas las candidaturas, felicitó a las ganadoras y les trasladó que "os demócratas estamos ao seu carón nese esforzo colectivo de garantir a liberdade de prensa".
Será el próximo viernes 3 de mayo, coincidiendo con el Día Internacional de la Libertad de Prensa, cuando se haga efectiva la entrega del Premio Couso. Ante la imposibilidad siquiera de enviárselo a las agraciadas, serán representantes de Reporteros Sin Fronteras y de Amnistía Internacional quienes acudan en su nombre. El programa de actos comenzará a las 17.30 con la ofrenda floral en el monumento de As Ceibes del Cantón de Molíns y la lectura del manifiesto del Colexio por parte de la periodista coruñesa Marta Otero, de La Opinión. A las 18.30 habrá firma en el Libro de Oro del Concello en el Jofre y, en el propio teatro, se hará el acto de entrega a las 19.00 horas.
Nilufar Hamedi (Babol, 1992) trabaja en el diario reformista Shargh y, dentro de sus labores periodísticas, el 16 de septiembre de 2022 consiguió acceder al hospital de Teherán donde estaba en coma la joven Mahsa Amini, que había sido detenida por la policía de la moral por llevar, supuestamente, el velo de forma "inadecuada". La fotografía que le hizo a los padres saliendo abrazados del centro médico se hizo viral durante las protestas que sucedieron a la muerte de la chica de tan solo 22 años.
Por su parte, Elaheh Mohammadi (Teherán, 1986) es reportera de sociedad y temas de mujer en el periódico Ham-Mihan. También en septiembre de 2022 se trasladó a Saqqez para cubrir el funeral de Amini e informó sobre los ataques de la policía en los actos fúnebres. Ambas fueron detenidas días después. A la primera, la condenaron a 13 años por supuesta colaboración con Estados Unidos y conspiración contra la seguridad nacional, además de propaganda contra la República islámica, los mismos cargos que a la segunda, que acumula 12 años de pena.
Fueron encarceladas en la prisión de Evin, conocida por acoger la mayor parte de disidentes iraníes en prisión. Fue el pasado 14 de enero, tras numerosas protestas, cuando fueron puestas en libertad bajo fianza después de pasar 15 meses encarceladas. No obstante, pesa sobre ellas la prohibición de dejar el país y ejercer la profesión, además de haber sido denunciadas por no llevar el velo al día siguiente de su liberación. Asimismo, informan desde el Colexio que no pueden mantener ningún tipo de contacto con entidades extranjeras, de modo que, al menos por el momento, no han podido recibir información ni de que han sido premiadas.