El patrullero 'Serviola' ha regresado este miércoles a su base del Arsenal Militar de Ferrol tras participar durante los tres últimos meses en un despliegue en la costa occidental de África y el golfo de Guinea, durante el que investigó más de 400 contactos en alta mar.

La unidad permaneció 93 días lejos de la ciudad ferrolana, en los que recorrió más de 13.000 millas. El operativo al que se sumó permitió apoyar a petroleros y pesqueros de España para garantizar su libre tránsito.

El buque partió de los muelles ferrolanos el 22 de marzo pasado para dirigirse a "una de las zonas de mayor peligro de piratería del globo", ha afirmado la Armada. Así, ha señalado que es un entorno de "vital importancia comercial para España y la Unión Europea". "A través de sus rutas marítimas, se posibilita la llegada de importantes materias primas e hidrocarburos", ha destacado.

Según el departamento castrense, ejerció labores de apoyo en el área del golfo de Guinea y colaboró con las Marinas de Nigeria, Ghana, Gabón, Guinea Ecuatorial, Costa de Marfil, Senegal y Mauritania. El objetivo, ha considerado, fue "potenciar sus capacidades en el ámbito marítimo". Tras recalar en Ferrol, su dotación iniciará un período de descanso previo a su próxima misión.

La Armada ha valorado que la costa occidental africana y el golfo de Guinea conforman un entorno "estratégico de primer nivel tanto para España como para el resto de la Unión Europea". "Posibilita la llegada de materias primas e hidrocarburos a través de sus rutas marítimas", ha matizado.

Finalmente, ha resaltado que el "conocido incremento de la piratería y de actividades delictivas en la mar supone un importante riesgo para la comunidad pesquera y marítima nacional que opera legítimamente en esta región".