El patrullero "Serviola" ha abandonado este martes su base en el Arsenal Militar de Ferrol para dirigirse a África, donde se sumará a un despliegue en su costa occidental y en el golfo de Guinea que se prolongará durante tres meses.

El acto de despedida a la embarcación ha estado presidido por el comandante del Mando de las Unidades de la Fuerza de Acción Marítima en la ciudad, José Manuel Faraldo. El barco afrontará tareas de vigilancia y seguridad marítima, ha asegurado la Armada.

Además, ha subrayado que desarrollará labores de cooperación militar y "apoyo a la diplomacia en los estados ribereños". Finalmente, ha destacado que contribuirá "a la mejora de las capacidades de las Marinas de estos estados y colaborará con otros buques de la Unión Europea presentes en la zona".

"Durante todo el período, permanecerá integrado en el Mando Operativo Marítimo, bajo control operativo del Mando de Operaciones", ha valorado.

Según la Armada, "la costa occidental africana y el golfo de Guinea constituyen un elemento estratégico de primer nivel para España". En este sentido, ha considerado que ese entorno "posibilita la llegada de materias primas e hidrocarburos a través de sus rutas marítimas".

Sin embargo, ha matizado que el "incremento de la piratería y otros delitos en la mar suponen un importante riesgo para la comunidad pesquera y marítima nacional que opera legítimamente en esta región".

"Es un elemento desestabilizador para la seguridad marítima en la zona, por lo que se pretende garantizar el transporte de recursos y mercancías hacia España", ha estimado.

En esta línea, ha recalcado que con "la presencia del patrullero en la costa occidental africana y el golfo de Guinea se contribuye adicionalmente a la mejora de las capacidades de los países ribereños".

De este modo, ha incidido en que esa coordinación se "basa principalmente en el diálogo y en la cooperación militar".