Las noticias de la guerra que libra Rusia contra Ucrania, no son nada halagüeñas para los rusos, pese a la destrucción que someten a la vecina nación ucraniana. Sus defensores, dan muestras de la capacidad combativa y sacrificio humano, para conservar su independencia, frente al coloso ruso.

Las fuerzas de unos y otros son abismales, los rusos, cuentan con más efectivos, aunque esto, no es garantía de éxito en ningún momento, tampoco su capacidad de armamento, al carecer de sofisticación, es más cuestión de propaganda que de efectividad. Como se está demostrando, en estos más de dos años de conflicto, en que Rusia, está perdiendo numerosos efectivos humanos y cantidad de material militar, que es imposible reponer, a la velocidad que se destruye, está siendo una guerra de desgaste muy acentuada para las tropas rusas, cuyas pérdidas están siete a uno.

Los efectivos militares no son fácil reponerlos y los rusos pierden en cada combate a diario más de mil soldados, esto le está pasando una pesada factura al ejército invasor, que no recuperará en años su efectividad. Su capacidad se verá mermada y la confianza de sus soldados también será una pesada losa para que sea recuperada.

En cuanto al material, este apenas está presente en los almacenes rusos, salvo la propaganda que conlleva el discurso al que están acostumbrados, en definir la situación que se les viene encima. Tanques apenas quedan y los que son entregados, se hacen a cuentagotas, no hay capacidad de una mayor producción. Es imposible, ante la destrucción causada a diario. Los blindados de combate están en sus últimas remesas. No hay manera de poder aumentar su producción. Tampoco los camiones de abastecimiento van por buen camino, los misiles escasean mucho y se usan a cuentagotas y los drones tampoco abundan, más bien escasean.

Ante este descalabro, la aviación rusa no se atreve a pasar el espacio aéreo ucraniano y envían a sus bombarderos a disparar desde el ruso, contra las posiciones defensivas de Ucrania y pese a ello, más de 20 aviones ya han sido abatidos por estos últimos. Los helicópteros están desde el inicio de la guerra desaparecidos. Se está dando la razón a Ucrania, si Rusia ataca a Ucrania, desde su territorio y no de los ocupados, Ucrania tiene derecho de defensa. Atacando posiciones rusas en suelo ruso, evitando ser alcanzados los defensores ucranianos. Mientras que la marina rusa, se ve obligada a retroceder a puertos más seguros, ante la amenaza de los drones marinos y aéreos, usados contra ellos.

Rusia en poco más de dos años de guerra ha perdido más de 600.000 efectivos y unas 87.000 unidades de vehículos de todo tipo: tanques, blindados, camiones cisterna, sistemas de artillería, drones, aviones y diverso material militar. Poco le puede quedar a Rusia en depósito. Su ejército puede quedar colapsado, entre el verano y el otoño de 2025. Si las pérdidas siguen a este ritmo.