El estado del parque del Montón ha sido denunciado en numerosas ocasiones, especialmente desde la Asociación de Vecinos de Caranza, que ha visto como de contar con lo que se llamó el “pulmón verde” de la ciudad para uso público, se ha pasado a disponer en el barrio de un gran vertedero incontrolado, inaccesible e insalubre.

Pasado el confinamiento, la presidenta de la Asociación de Vecinos, Mapi Rodríguez, visitó el parque del Montón para constatar el estado del mismo y denunciar la situación, reclamando al ejecutivo de Ángel Mato que tomase medidas de conservación de uno de los grandes espacios verdes y naturales del municipio. El regidor se desplazó en días pasados a la zona, con el fin de analizar la documentación de las parcelas municipales, que no solo abarcan lo que sería el jardín botánico sino otras propiedades aledañas, y ayer mismo se anunciaba desde el área de Servicios la contratación de unos trabajos de mantenimiento y conservación de las zonas verdes públicas de O Bertón, el Montón y Torrente Ballester por un importe total de 13.471,92 euros.

Estos espacios no se encuentran incluidos en el contrato de mantenimiento del año 2013 pero ahora estarán en el nuevo pliego del contrato de Jardines, en el que se está trabajando.

El parque, que en su día contaba con cierre para evitar vandalismo, ya no dispone de ningún portal y es de entrada libre. De hecho, hubo denuncias de ocupaciones en las edificaciones que se encuentran en el interior del espacio verde, que tuvieron que ser tapiadas por este motivo.

La zona verde está totalmente abandonada y pueden verse desde árboles caídos o ramas rotas, que atraviesan los caminos que en su día fueron de paseo, hasta zarzas y maleza sin cortar desde hace mucho tiempo.

Estos días se ha actuado en el acceso al parque para mejorar la imagen de la zona.

Además de la falta de mantenimiento de los espacios verdes, esta área, debido a que se encuentra apartada de la ciudad y en un lugar poco transitado, se ha convertido en un gran vertedero de todo tipo de muebles y escombros. Aunque en las inmediaciones del parque ya era habitual –y fue denunciado numerosas veces– que se dejase material de obra, ahora también en el interior se pueden ver todo tipo de desechos. Estos días ya se está procediendo por parte de Urbaser a la retirada de los mismos, tras la denuncia vecinal.

Más allá de la próxima limpieza y desbroce anunciado, desde la AVV se reclama un proyecto más amplio que determine el uso de la zona, apostando desde la entidad vecinal por mantenerlo como jardín botánico y zona de paseo, tal y como fue en sus primeros momentos, en los que se invirtieron hasta 800.000 euros que se han perdido, por la falta de un plan de mantenimiento sostenido en el tiempo.