O PARRULO FERROL 2-5 OSASUNA MAGNA

O Parrulo hizo méritos para un resultado más ajustado en el encuentro de dieciseisavos de final de una Copa de la que ayer se despidieron los jugadores de Óscar Vigo. Y es que el conjunto ferrolano pagó caro un inicio frío y un tanto errático, en el que, además, el Osasuna estuvo muy acertado en los primeros minutos, con un primer gol de Raúl Rocha en un tiro lejano sin aparente peligro y otro de Zurdo casi a continuación tras un lanzamiento de falta. 

Dos minutos tras los que los ferrolanos decidieron hacerse con el control del balón y tras las que llegaron sus primeras ocasiones con sendos tiros de Hélder y de Alberto. Sin embargo, fueron los visitantes los que volvieron a mover el marcador (0-3), cuando todavía era el minuto 11, de nuevo tras un lanzamiento de falta que Rocha anota ante un Barranquero al que le faltó tiempo para reaccionar. Espoleado por este castigo, Hélder anotó el 1-3 cuando, en una jugada en la que el Osasuna protestaba una posible falta, el local aprovechó el desconcierto visitante para con un gran tiro por el centro, batir a Miguel (1-3). Lo intentó entonces O Parrulo con juego de Barranquero en pista, si bien Zurdo deshacía el conato de remontada parrula con un gol a portería vacía en el minuto 14. Sendas ocasiones de Borja y Domingos parecían apuntar al arranque de O Parrulo, si bien, y al igual que la inusualmente tímida afición ferrolana ayer, los locales no llegaban a acelerar. 

Los departamentales comenzaron más fuertes la segunda mitad, sin embargo, y al igual que en la primera, y tras errar Yaguito y Costi dos claras ocasiones, el Osasuna hizo el 1-5 de la mano de Rocha. Volvió a doler este tanto en las filas locales, que de nuevo se tomó una pequeña revancha con el gol de Santi a continuación (2-5). Y aquí comenzaron los mejores momentos de O Parrulo, con numerosas llegadas –de destacar una de Noel que lo hizo todo excepto marcar–, hasta que Costi vio la tarjeta roja en el minuto 32. Los locales defendieron a la perfección su inferioridad, pero sin Domingos, lesionado en el primer tiempo, ni el expulsado, junto con un excesivo protagonismo de unas protestadas decisiones arbitrales, la recta final se hizo un tanto cuesta arriba a los locales. A pesar de esto, los de Vigo intentaron hasta la saciedad recortar distancias, pero sin éxito.