Valentín González Formoso (As Pontes, 1971) ha asumido este miércoles el mando del socialismo gallego con el reto de volver a unir al partido en torno a un liderazgo sólido que permita al PSdeG revalidar su poder municipal y volver al Gobierno de la Xunta de Galicia.
González Formoso, que es alcalde de su localidad natal desde hace 14 años y desde julio de 2015 preside la Diputación de A Coruña, ha estado arropado por el presidente del Gobierno y líder de los socialistas, Pedro Sánchez, en un acto en el que su dirección ha conseguido el respaldo del 81,47 por ciento de los delegados pese a la división patente entre el nuevo líder y su antecesor y rival en primarias, Gonzalo Caballero.
Durante su primera intervención tras ser proclamado nuevo líder del socialismo gallego, González Formoso ha reivindicado la gestión del Gobierno de Pedro Sánchez que, en el “peor momento económico y social” del país, ha dicho, ha sabido velar por la salud y el empleo de los ciudadanos pese a la “deslealtad” que tuvo que afrontar por parte de los partidos de la oposición.
González Formoso ha confesado mirarse en el espejo de Sánchez, por lo que asume el liderazgo de la formación en Galicia con un “gran orgullo” pero también con la “altísima responsabilidad” de “reforzar la presencia” del PSdeG en la sociedad gallega a fin de que el partido “obtenga el premio que merece y vuelva a estar al frente de la Xunta de Galicia”.
“Por eso estamos aquí, todos y todas”, ha arengado el nuevo líder, que ha pedido “esfuerzo” a todos los militantes del partido para de ese modo poder volver a ser útiles y “capaces de comprender qué es lo que le importa a la ciudadanía” y ser, de nuevo, “merecedores” de la confianza de todos, de "la mayoría" de los gallegos.
"Seremos capaces de ser merecedores de la confianza de los gallegos en las próximas elecciones municipales de 2023 y después en las autonómicas porque el PSdeG entiende Galicia y siente a este país", ha preconizado.
Para conseguir este objetivo, Formoso ha abogado por abrir las puertas de la formación "a todo aquel que se sienta progresista y tenga ganas de aportar un grano de arena" a favor del futuro del país, ya que todo aquel que se sienta “galleguista, europeísta y progresista” tiene en el PSdeG “su casa”.
También ha propuesto “tres grandes acuerdos” a todas las fuerzas políticas de este país en materia de innovación, economía y defensa de los servicios públicos, que serán tres de las prioridades de su mandato al frente de la secretaría general.
Para dar cumplimiento a todos los retos que se le abren, Formoso contará con el respaldo de Pedro Sánchez, que, en la clausura, ha confiado en que el cambio en el liderazgo del PSOE gallego sirva para que al igual que hoy los socialistas “gobernamos España" pronto vayan "a volver a gobernar Galicia”.
"Gobernamos España y pronto, Valentín, vamos a gobernar la Xunta de Galicia", ha asegurado Sánchez, que ve en el PSOE el "partido imprescindible" de todos los territorios que conforman el estado español “porque nunca fallamos a España, como estoy convencido de que el PSdeG-PSOE nunca fallará, como nunca ha fallado, a Galicia".
Al hilo de esta observación, el presidente del Gobierno ha considerado que la historia de Galicia, de su presente y del futuro, no se va a poder entender "sin la aportación del PSdeG" en los términos referidos.
Tras este cónclave, el socialismo gallego espera abrir una nueva etapa de “ilusión” que permita que el respaldo que obtiene en las elecciones municipales y que le ha permitido gobernar las principales ciudades gallegas y liderar tres diputaciones provinciales también se extienda al campo autonómico tras varias citas de resultados pobres.
Un desafío que las bases han encomendado a González Formoso que, a lo largo de estas dos jornadas, ha trabajado por dotar de peso orgánico en el PSdeG a quienes ya ostentan el poder institucional del partido.
Para ello, ha colocado en su dirección a la presidenta provincial de Pontevedra, Carmela Silva; al edil de A Coruña José Manuel Lage; al presidente de la Fegamp, Alberto Varela; o la alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, entre otros.
La fortaleza interna con la que parece empezar su trayectoria en O Pino ha quedado reflejada con el respaldo de los alcaldes de Vigo, Santiago, A Coruña y Ferrol, así como el expresidente de la Xunta Emilio Pérez Touriño, el exministro de Fomento José Blanco o el antiguo secretario general del partido José Ramón Gómez Besteiro, que ha reaparecido en el congreso del PSdeG después de un lustro apartado de la vida pública.
Con todo, puede que las aguas del socialismo gallego no permanezcan en calma por mucho tiempo ya que la única nota discordante en el congreso ha sido la protagonizada por Gonzalo Caballero que todavía es el portavoz del PSdeG en el Parlamento autonómico.
Caballero ha ratificado su intención de continuar en la Cámara gallega pero está por ver en qué papel ya que la dirección parece tener claro el forzar su paso atrás en el grupo parlamentario pese a que Gonzalo cuenta, al menos por el momento, con el respaldo de varios diputados socialistas.