La ciudad naval volvió a mostrar ayer su pasión por las artes escénicas en la que fue la penúltima –y más completa– jornada de la quinta edición del festival “Fóra do Mapa”; una iniciativa nacida en 2016 con el objetivo de aunar en un único evento el patrimonio artístico, arquitectónico y cultural de Ferrol con un teatro contemporáneo y valiente.
Tras una semana de interesantes propuestas y como preludio de un cierre de edición por todo lo alto, la jornada de ayer contó con el mayor número de representaciones de todo el ciclo. En total fueron seis espectáculos –cuatro de los cuales con varios pases– de muy diversa temática los celebrados a lo largo de toda el día en puntos emblemáticos de la ciudad naval.
Así, la jornada comenzó a las nueve de la mañana en el Centro Cultural Torrente Ballester con el segundo pase de taller de interpretación del profesor Andrés Lima –también se celebró el viernes a las once de la mañana y repetirá hoy a las nueve–. Lima, director, autor, actor y docente de prestigio con un Premio Nacional de Teatro y cinco galardones Max, desarrolló un taller para profesionales de la interpretación.
La segunda propuesta del día, con dos pases, de mañana y tarde, corrió a cargo del artista Rubén Darío, que acompañado de los “beats” de un house discreto pero poderoso –con DJ en vivo–, condujo a los asistentes a través de una performance en la que el propio público fue la pieza más fundamental. El espectáculo también tuvo lugar en las instalaciones del Torrente Ballester.
Ya por la tarde, las propuestas se expandieron por más áreas de la ciudad naval, con cuatro espectáculos programados ya más centrados en las artes interpretativas clásicas, aunque desde una óptica más moderna. Por una parte, los espectáculos GPS, de Mabel Rivera; A Partida, de Helena Varela; y Polo de Franco, de Luma Gómez, se interpretaron en tres pases –a las 18.00, 18.45 y 19.30 horas– en el bar Manchita Cosa, en el Casino Ferrolano y en el propio edificio consistorial, respectivamente.
Por otra, y ya como cierre de jornada, el Antiguo Hospicio acogió a partir de las nueve de la noche la obra Imaxinábaa, de Nuria Vil y Morlitam.