El amplio patio del centro cultural Torrente Ballester ha sido alfombrado. Su suelo es estos días floral, con un objetivo social internacional. Las distintas entidades han colaborado en la elaboración de una alfombra inclusiva en la que tienen cabida diferentes aspectos vinculados, además, con las Naciones Unidas. Esta labor artística será también un ingrediente más para engrosar el expediente de la ciudad naval a Patrimonio Mundial.