La Semana del Patrimonio Invisible busca sacar a la luz una riqueza de la ciudad que está al lado del residente habitual pero que pocas veces repara en ella, bien por desconocimiento o por no ser accesible habitualmente al público. De eso se tratan las visitas guiadas que atraen masivamente cada año al público, la prueba está en que en un día apenas quedan plazas libre, a pesar de haberse incrementado.