Las aguas no se calman –ni tienen pinta de amainar– en el conflicto educativo que está viviendo la villa de Cedeira tras los recortes planteados en el plantel de docentes del IES Punta Candieira. Y es que el conselleiro de Educación, Román Rodríguez, declinó ayer la entrevista solicitada por el Concello –con la firma de los tres partidos políticos con representación municipal– y, en su lugar, ha emplazado a los portavoces a reunirse con el jefe territorial del área, Indalecio Cabana.
Para el regidor cedeirés, Pablo Moreda, la respuesta del responsable de la Xunta es "un ninguneo para o pobo de Cedeira", por lo que adelantó que no acudirán al encuentro "a non ser que sexa co conselleiro". “Sen pretender menosprezar ao xefe territorial de Educación, consideramos que a reacción política, coa unanimidade do PSdeG-PSOE, o BNG e o PP, e a mobilización cidadá que esta situación suscitou na nosa vila merece que o máximo responsable, o conselleiro Román Rodríguez, nos reciba de inmediato”, argumentó Moreda.
El alcalde criticó que se trate de desviar “ou pasar por alto” el problema y aprovechó para recordar también la presencia de Rodríguez en Cedeira para la presentación de la serie “Rapa”. “Debería estar tamén para tratar este tema”.
Por su parte, desde la plataforma vecinal SOS Punta Candieira, creada para protestar por los recortes en el centro educativo de la villa, califican la respuesta del conselleiro de "un insulto". "Parécenos unha falta de respeto, porque ese é o seu traballo. Se non consiste niso, en escoitar os problemas que podamos ter... entón, en que consiste?", indicó, a preguntas de este Diario, su portavoz, María Pernas.
Tras la colocación de pancartas, la recogida de firmas o las manifestaciones por las calles del centro de la villa, desde la plataforma vecinal se plantean ahora llevar a cabo medidas más duras –en un primer momento, encierros en las instalaciones del instituto– ante el agravio que supone para los menores el recorte en el profesorado. "Temos pensado facelo na fin de semana porque non queremos entorpecer o procedemento de educación dos nenos”, explica Pernas, apuntando a que tampoco quieren molestar “a unha dirección do centro que está perdendo anos de vida loitando contra os recortes e solucionando como pode a situación”. “Que teñan clarísimo que nós non imos calar. Isto vai chegar a onde teña que chegar”, sentenció.