Diputación y Moeche firman un convenio para el centro de transformación alimentaria

Diputación y Moeche firman un convenio para el centro de transformación alimentaria
Un momento de la firma del acuerdo efectuada ayer | diputación

El presidente de la Diputación, Valentín González Formoso, y la alcaldesa de Moeche, Beatriz Bascoy, rubricaron ayer el convenio de colaboración para convertir la antigua nave de los quesos de San Ramón en el Centro comarcal de Apoio ao Desenvolvemento Rural, un centro de transformación alimentaria en el que también participarán también los Concellos de Cerdido, San Sadurniño y Valdoviño –los respectivos alcaldes también estuvieron ayer presentes en el acto–.

El acuerdo supone una aportación de 103.545,99 euros para las obras. El futuro centro, en el que se invertirán más de 235.000 euros, se concibió como un punto totalmente equipado para la transformación alimentaria de la pequeña producción de la comarca, pero también como lugar de formación e intercambio de ideas integrado en la Red Provincial de Espazos de Traballo, de la que ya forman parte Oleiros, Boiro, Brión, Ames y Carballo.

Además de la aportación provincial, las instalaciones también cuentan con otros 119.600 euros de subvención procedentes de fondos europeos del Feader gestionados por el GDR Seitura 22 dentro del programa Leader. Por su parte, la Dirección Xeral de Gandeiría, Agricultura e Industrias Agroalimentarias asumió el importe correspondiente al proyecto técnico, cifrado en 12.000 euros.

La aportación provincial se destinará a la ejecución de la obra en la edificación y a la urbanización de su entorno, mientras que la del Leader tramitada por el GDR Seitura 22 irá mayoritariamente para equipación. Tras la firma del convenio con la Diputación, el Concello de Moeche –como titular de las instalaciones– podrá iniciar el expediente de contratación. Los cuatro ayuntamientos implicados definirán en paralelo el modelo de gestión, en el que se le quiere dar cabida tanto a pequeñas explotaciones agroganaderas como a particulares que deseen elaborar sus productos para consumo propio o para venta directa.

“A Covid-19 fixo que como consumidores e consumidoras volvésemos mirar ao comercio e a produción de proximidade, aos alimentos cultivados e criados preto de nós e á xente que traballa no agro. Debemos ver a crise como unha oportunidade e aproveitar ese cambio de tendencia para volver poñer en valor o sector primario e reactivar a economía do rural”, señalaba ayer la alcaldesa que avanzó que estima iniciar las obras tras el verano. l

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