Deportivamente el proyecto no cuajó, pero una temporada más el Baxi Ferrol congregó a un grupo humano plenamente identificado con el proyecto. A lo largo de esta semana, la mayor parte de las jugadoras han ido abandonando la ciudad –algunas nacionales se quedarán hasta junio–, en buena parte de los casos en lo que será su adiós definitivo al club. Por eso, no han sido pocas las que han querido despedirse de la entidad y de su afición dejando constancia a través de las redes sociales de su afecto.
Entre ellas, la flamante MVP de la última jornada de la liga regular, una Elin Gustavsson que, por su constancia, dedicación y trabajo, ha sido de las jugadoras más queridas por el público. En su adiós agradeció “el apoyo de la familia del Baxi Ferrol”. “Desearía poder daros un gran abrazo, porque vosotros sois los verdaderos MVP”, sentenciaba a través de su cuenta de Twitter.
El apoyo incondicional que han recibido por parte de los seguidores ha sido el referente común en muchas de esas notas de despedida, como la que firmaba Amarah Coleman en su cuenta oficial, agradeciendo “el amor y apoyo incondicional para el equipo y el club. Gracias por darme la oportunidad de iniciar mi año de ‘rookie’ en una gran ciudad. La temporada no terminó de la forma que nosotros habríamos deseado pero con vuestro apoyo el Uni Ferrol se levantará de nuevo”.
La otra jugadora norteamericana del club, Shelby Cheslek, también puso el acento en su despedida sobre el respaldo de la afición y del club, asegurando que “siempre estaré agradecida por mi etapa en España rodeada de gente tan increíble”, con mención especial para Sandra Prieto.
Para buena parte de las jugadoras foráneas que conformaban la plantilla, el Uni resultó su puerta de entrada hacia el atractivo baloncesto español. Una oportunidad que para Nikki Fong resultó un gran aprendizaje: “Las cosas no fueron como nosotras queríamos, pero estoy agradecida por la gente que he conocido y las cosas que he aprendido en mi estancia”.
Pero, como de costumbre, si alguien fue capaz de condensar el sentir de la plantilla fue una de esas jugadoras identificada al cien por cien con el Uni Ferrol. La capitana, Patri Cabrera, que se convirtió en Valencia en la jugadora que más veces ha vestido la camiseta de la entidad en Liga Femenina 1 –113 partidos– firmaba unas emotivas palabras dedicadas al entorno del club. La que califica como “quizás la temporada más dura de mi carrera”, le ha servido “para aprender una lección”, pero también para estar segura de que “todos tenemos que mirar hacia delante y no volver a cometer los mismos errores”. La jugadora canaria insistía en que “siempre sacábamos las fuerzas de donde no las había para seguir trabajando duro pasara lo que pasara y estar unidas”. En ese contexto, se queda “con tener unas compañeras que no se rindieron. Pudimos ser mejores o peores, pero no nos rendimos”, a la vez que hace una petición clara: “Animo a toda esa gente a que siga unida al club, a que sigan apoyando al equipo porque equipo y afición es como se volverá a subir y este club volverá a estar donde se merece”. Ella, responsable de un equipo infantil, será de las que permanezca en Ferrol hasta junio.