Casi 1.300 palistas, 111 clubes de toda España y el Náutico Firrete de Pontedeume terminando como decimoquinto en el ránking final de entidades. La delegación de la villa cerró “muy contenta”, su participación en el Campeonato de España de invierno en su modalidad de sprint olímpico, como así lo indica su técnico Óscar Calvo, viendo cómo los suyos se subieron en tres ocasiones al cajón y, además, se colocaron como líderes de la cita liguera de Primera, en una campaña en busca del ascenso a División de Honor.
Una competición regular a la que los eumeses se encaramaron a lo más alto gracias al buen hacer tanto de sus sénior como de sus sub 23 –los júnior en este caso no puntúan–. Una de las generaciones de oro eumesas, la que ahora afronta su primer año sub 23, demostró que sigue manteniendo el potencial y la calidad que llevó a Martín López, Antón Cao, Iker Veiga y Óscar Allegue –este todavía júnior– a hacer historia en las pasadas ediciones del Campeonato Europeo y del Mundo, con palistas del mismo club conformando el K-4 nacional, entre otras gestas, como el oro mundial conseguido por un Martín López al que el bronce firmado ahora en Sevilla sobre sus 5.000 metros le supo muy bien. Y más por cómo lo consiguió.
“Fue una regata muy dura desde el principio”, relata el naronés que, tras un buen arranque marcando él el ritmo, la unión de dos grupos hizo que se quedase bastante retrasado. Un buen paso por la ciaboga hizo que volviese a la pelea.
“El primero que cometiese un error o fallase un poquito era él que se iba a quedar atrás”, cuenta López que tuvo que volver a remar contracorriente para dar caza a dos escapados. “Fuimos finalmente un grupo de cuatro los que llegamos a meta y ahí tuvimos que ir al sprint”, señala el del Firrete, “yo iba bastante reventado y no tuve para subir, pero se vio que mis compañeros tenían un último petardazo ¡madre mía!”.
Y tanto, ya que poco más de dos segundos separaron al ganador –un Alberto Llera que sumaba un nuevo título en esta categoría– con el cuarto Ernesto Goribar y contra el que López se hizo con el bronce. “Estoy muy contento con el resultado”, señalaba un palista que, si bien no firmó una primera plaza que le abriese para puerta al Mundial, todavía tiene la oportunidad de entrar en ese equipo en las pruebas que tendrán lugar en Verducido el 13 y 14 de abril.
En esta misma franja de edad su compañero Antón Cao terminó en el “top 10” de esta dura cita, mientras que Iker Veiga fue decimoquinto –un incidente de Bruno González en la salida le impidió un mejor resultado, siendo vigésimo séptimo– “Y hay que tener en cuenta que no están preparando estas distancias”, señala Calvo sobre unos pupilos que se encuentra en el CAR de Sevilla –González está en Pontevedra– enfocados, principalmente, en 500 metros. Unos buenos resultados que se unen al decimoctavo lugar del todavía júnior Brais Rodríguez, en C-1 sub 23.
Una destacada actuación de la cantera en la que también brillaron los asimismo júnior Óscar Allegue y Borja López, que a punto estuvieron de estar juntos en el cajón. El primero –sexto en el pasado Europeo– se hizo con el subcampeonato y todavía tiene opciones de acudir a las citas internacionales, en función de los próximos clasificatorios y del resultado del campeón. Por su parte, López –hermano de Martín–, en su primer año en la categoría “hizo una regata muy buena”, como señala su entrenador, finalizando cuarto a menos de un segundo del bronce.
En sénior, con victoria del subcampeón mundial y olímpico Cubelos, Luis Blanco y Santi Cruz finalizaron en los lugares 41 y 53, mientras que un vuelco de Antón Rey lo relegó a la última plaza, si bien consiguió puntuar para su club. Cruz, además, hizo doblete compitiendo en veteranos, siendo tercero.
Una doble presencia que también hizo el pontés del Grupo Xuvenil Antonio Polo. El de la villa sumó un nuevo título a su largo palmarés al ser el mejor en 44-49, en una dura pelea con su excompañero de equipo, el viveirense Alberto Pigueiras, con un oro en menos de un segundo.