Sin cientos de kilómetros por delante y con el aliciente de remar ante una afición que nunca defrauda, los remeros de la “Santa Olalla” aresana harán frente esta tarde –18.13 horas– a la que, sin duda, será una de las regatas más especiales de la campaña.
Con la XV Bandeira Concello de Ares se despide de sus seguidores como actual integrante de la Eusko Label Liga –si bien matemáticamente el descenso todavía no es un hecho, la situación es muy complicada–, por lo que “en todas las regatas vamos a morir, siempre. Y en esta vamos a intentar conseguir uno de nuestros mejores resultados”, señala José Manuel Peláez, Pendo, en uno de esos pocos viernes que él y los suyos no tienen que cargar la furgoneta para cubrir la no corta distancia que les separa de sus habituales campos de regatas.
Una situación que llega tras haber “digerido” la virtual pérdida de categoría, y con esta “resignación” los aresanos entrarán en liza para volver a pelear por realizar “la mejor competición posible, y con el rabillo mirando ya la clasificatoria de La Concha”.
Y es que prácticamente superado ese momento “que sabíamos que podría llegar”, señala Pendo, la campaña sigue teniendo alicientes, además de despedirse con el mejor sabor de boca de la Eusko Label, y el principal pasa por volver a repetir el sueño vivido el pasado año al acceder a la final de la competición donostiarra.
Para ello, los aresanos tendrán que firmar uno de los siete mejores tiempos entre las 24 traineras que este miércoles entrarán en competición en las aguas vascas en la cita de clasificación. Y, a pesar de lo que se pueda pensar viendo la clasificación, los tiempos dan alguna posibilidad a Ares, con Cabo siendo uno de sus principales rivales en este caso. Pero esto será otro capítulo en esta campaña, en la que primero, y más importante, pasa por echar el resto ante sus aficionados y hacer lo mismo mañana en Boiro.