"Mi hermano se lo merece, es muy trabajador, ha hecho de todo desde que llegó a Ferrol hace siete años, se lo tiene más que merecido un premio como este".  Así se expresaba hace unas horas la hermana de Herito Roque, un joven cubano que decidió hace solo unos días acercarse a su administración de lotería habitual -número 6 del Inferniño-, donde juega Quiniela y Bonoloto y se dejó seducir por un décimo del número 11840, agraciado hoy con el Tercer Premio del Sorteo Extraordinario de Navidad.

"Vi que quedaban pocos y me decidí por ese número, tuve suerte", indica Herito. El adquirió uno de los diez décimos de una serie al completo que vendió Julio Regueiro, en la administración número 6, situada en la Estrada de Castela, en pleno barrio del Inferniño.

Su hermana, Sandra, no podía estar más feliz por su hermano y, por ende, por toda la familia. Un grupo de personas llegadas de Cuba hace siete años que decidieron dejar todo atrás para vivir una vida mejor y ahora reciben este pequeño empujoncito. 

"Estamos felices, por el premio de la lotería, que le brindará a mi hermano la oportunidad de ahorrar algo, enviar ayuda a nuestra familia en Cuba y también ayudar a comprar un piso, pero también estamos muy contentos porque este año, por fin, hemos podido traer aquí con nosotros a nuestro nuestro padre y nuestro abuelo". 

Eso tiene la tan deseada lotería de Navidad, que reparte suerte, en muchos casos, como el que nos ocupa, entre gente humilde y trabajadora a la que no le cambiará la vida de forma radical, pero sí que han recibido una ayudita para vivir más desahogadamente y, sobre todo, disfrutar de unas estupendas navidades.