La Fiscalía Provincial de A Coruña ha abierto diligencias por la denuncia de la Fundación Española de Abogados Cristianos por la "quema de una cruz" en el municipio de Neda, mientras que esta entidad ha acusado a "miembros del BNG" de ser los "responsables del incidente", pues este partido había hecho allí un acto reivindicativo de la memoria democrática.
Un decreto de la Fiscalía Provincial de A Coruña del 27 de marzo, divulgado este martes, declara la apertura de diligencias por la denuncia y determina que deben ser identificadas las personas participantes en el acto denunciado y el responsable de los hechos.
Lo hace para "determinar la posible existencia de un delito de odio y/o de ofensa a los sentimientos religiosos", prosigue el escrito.
En un comunicado, la Fundación les ha atribuido "posibles delitos de odio, ofensa a los sentimientos religiosos, contra el patrimonio histórico y manifestación ilegal" y ha pedido a las fuerzas de seguridad que identifiquen a los "participantes en el acto denunciado y al o los responsables de la quema".
Su letrada Ana Antón ha estimado que los hechos denunciados muestran "el odio que algunos partidos de la extrema izquierda tienen hacia los católicos" y ha resaltado que actos "de este tipo no pueden quedar impunes".
"Ante la pasividad de las instituciones, desde Abogados Cristianos llegaremos hasta el final en la defensa de los símbolos cristianos", ha apostillado la entidad, que en su denuncia alude directamente al BNG por unos hechos ocurridos entre el 21 y el 22 de enero pasados en la conocida como Cruz de los Caídos.
La propia formación nacionalista denunció entonces la quema de un paño y de una faja que habían colocado integrantes del partido para reclamar la retirada de esa "simbología franquista" en el marco de un "acto cívico" para "denunciar la pervivencia de esta simbología".
Así, reivindicó el "cumplimiento" de la Ley de Memoria Democrática y aludió a un "acto vandálico" que puso "en evidencia la pervivencia de ideologías y métodos que persisten en la imposición y quedan alejados de la tolerancia de una sociedad democrática".
La portavoz del BNG de Neda, Cristina Bouza, ha afirmado este martes a EFE que aquel evento fue "democrático y reivindicativo" en aras de la aplicación de la legislación y ha recordado que el "paño negro apareció quemado" en la noche del 21 al 22 de enero y la "faja desapareció".
Al respecto, ha atribuido la denuncia a "gente próxima a la extrema derecha" y ha incidido en que lo ocurrido "fue al revés de lo que puso en conocimiento" de la Fiscalía la entidad, ya que, ha añadido, "queríamos que quedara allí colgado", en referencia al paño.
Tras el suceso, el BNG comunicó los hechos al Ayuntamiento de Neda y solicitó "la oportuna investigación para aclararlos", además de la "retirada de este elemento de la simbología franquista".