Casi medio centenar de González-Aller se dan cita este sábado en Madrid en una congregación familiar de descendientes de Antonio González-Aller y Fernández (1860-1915) y Concepción Acebal Angulo (1856-1896). Aunque ninguno de los dos era ferrolano, mucha de su descendencia tiene sus raíces en Ferrol y se han afincado en la ciudad naval desde hace años.
El evento, en el que toman parte 420 personas, destaca tanto por la numerosa participación, una cifra de asistentes extraordinaria —tratándose de descendientes de un matrimonio que vivió en el último tercio del siglo XIX—, como por la importancia de reunir a una de las sagas familiares que más miembros ha aportado a la Armada Española.
Antonio González-Aller fue el pionero de una dinastía que ha mantenido una tradición naval ininterrumpida, con cinco generaciones consecutivas de marinos en sus filas. Además de varios de sus hijos, que siguieron su vocación en la Armada, los matrimonios de sus hijas vincularon a la familia González-Aller con otras importantes estirpes navales, como las familias Calvar, Díaz del Río, Togores y López-Cortijo.
Entre los que no se dedicaron a la carrera naval, se encuentran destacados miembros del mundo diplomático, empresarial y figuras reconocidas en el ámbito de la cultura, ampliando la influencia de la familia más allá del ámbito militar.
El encuentro familiar comienza con una misa concelebrada incluso por miembros de la propia familia, que han seguido la vocación religiosa. Posteriormente, se llevaron a cabo presentaciones donde los asistentes pudieron conocer más sobre la rica historia familiar y de sus antepasados.
Uno de los momentos más emotivos de la jornada será, en palabras de la familia, "el homenaje a la bandera, símbolo de la lealtad de la familia a las instituciones del Estado, representadas por la Monarquía". La vertiente más distendida de la celebración llegará con un festival, en el que también la estirpe González-Aller tendrá protagonismo, ya que varios artistas familiares ofrecerán actuaciones musicales.