El sector funerario tiene gran presencia en la Comunidad gallega, íntimamente relacionada a la cultura de la muerte. La sociedad avanza con el paso de los tiempos, con un cambio a la hora de afrontar los duelos que también se ve reflejado en los servicios que demandamos cuando despedimos a un ser querido.
Así lo confirma, por ejemplo, el director del tanatorio de Vilar do Colo (Fene), Félix Soto, que hace hincapié en la evolución que han experimentado las instalaciones desde su apertura. “Pusimos en marcha los servicios funerarios en 2016 y, desde el pasado año, contamos también con crematorio. Vimos que hubo y que hay un aumento muy reseñable de las cremaciones y decidimos ofrecer también esa posibilidad”, afirma.
Las cremaciones han aumentado y la demanda de productos ecológicos es cada vez mayor
Soto explica, asimismo, que la sociedad está cada vez más comprometida con el medioambiente y que demanda poder dar el último adiós a sus familiares reduciendo, en la medida de lo posible, la huella que dejamos en el planeta.
“El principal producto que tenemos es el arca ecológica. Es de madera, como las tradicionales, pero viene sin barnices. Disponemos también de urnas para las cenizas que son biodegradables. Son servicios que ofrecemos, y en muchos de los casos ya no tenemos que explicar en qué consisten, sino que es la propia gente la que pregunta si los tenemos. La sociedad está cada vez más mentalizada con este tema y nosotros somos conscientes de ello, avanzando en sintonía con ese cambio”, asevera el responsable del tanatorio fenés, remarcando el avance del sector funerario, “más liberalizado, más transparente y con mayor grado de profesionalidad y tecnificación”.
La pandemia del covid-19 llegó por sorpresa y azotó nuestra forma de ver la vida. “Sinceramente, nos enseñó a todos a convivir con la muerte”, apunta Soto, haciendo referencia a la digitalización del sector funerario desde entonces.
“Las empresas nos estamos transformando. Gracias a la digitalización logramos hacer los servicios más accesibles y sencillos para las familias. Antes era impensable que se contratasen por internet o que hiciesen preguntas a través del correo electrónico. Hoy en día es algo habitual, supongo que también por esa época en la que había más miedo a acudir a los sitios por la pandemia. Pero es algo que ha pasado en todos los sectores, no solo en el nuestro. Antes ibas a la tienda a comprar un pantalón y ahora lo compras por internet”, ejemplifica Soto.
“El principal objetivo de estos cambios es conseguir que las familias sigan confiando en nosotros como lo hicieron hasta ahora, poder satisfacer la demanda de los clientes adaptándonos a sus necesidades”, remarca, dejando constancia de que desde el tanatorio de Vilar do Colo se ofrecen todos los servicios de manera personalizada. “Queremos que desde que tenemos el aviso, la familia pueda centrarse solo en esos momentos de duelo”.