La Casa da Xuventude de Ferrol tiene el nombre propio de Xeración, un proyecto que dispone de una sede abierta en horario de oficina para asesorar a personas interesadas en realizar un voluntariado fuera o simplemente aprender idiomas. Por las tardes, el espacio alberga actividades gratuitas, publicadas tanto en su página web como en redes sociales, en las que se encuentran participantes de la comarca y extranjeros, que forman una comunidad de jóvenes implicados en la sociedad y su entorno.

Xeración se nutre de voluntarios tanto internacionales como locales, con los que desarrollan acciones como las limpiezas, los talleres o proyectos europeos a través de los que se posibilitan experiencias en el extranjero, realizando desde cursos de formación hasta intercambios, y también en Ferrol, sobre todo en la época de primavera-verano.

En la entidad colaboran personas que llegan desde múltiples países por medio del programa de movilidad de voluntariado que ofrece el Cuerpo Europeo de Solidaridad, como es el caso de Camilla Checchi, de Milán, que en un principio tenía la ilusión de encontrar un empleo en España. Tal como explica la italiana, una de las principales barreras era el idioma, que utilizó para la entrevista con fluidez, por lo que esta es una gran oportunidad para aprenderlo y en un futuro poder quedarse por más tiempo, además de “conocer gente nueva, situaciones y organizaciones como Xeración, porque me gustaría trabajar en un sitio así”.

Los voluntarios que vienen de fuera residen en los dos pisos con los que cuenta la entidad en Ferrol, por períodos de 2 a 12 meses. En el caso de Camila Checchi, que está en la ciudad desde octubre, son 10. Durante esta estancia, aprovecha su formación como diseñadora gráfica para colaborar en los proyectos programados para este año, así como para poner en práctica intereses como la creación de sitios web o contenidos audiovisuales.

“Tenemos a algunas personas que nos ayudan a conocer mejor Ferrol”, continúa la voluntaria, refiriéndose a los jóvenes locales, que constituyen el otro pilar fundamental de la entidad. Tanto para estos como para los de fuera, “casi todas las tardes ofrecemos una agenda de actividades que van desde noches de cine hasta talleres de oratoria, clases de creatividad, dibujo, pintura, jam sessions...”, concreta el coordinador de Xeración, Fran Sequeiro. Estas propuestas no son solo una forma más de continuar dinamizando la ciudad, sino también un método para generar grupos que se impliquen como mentores de los extranjeros o incluso llegar a impulsar sus propias iniciativas.

Asimismo, la Casa da Xuventude posibilita la participación de usuarios locales en proyectos internacionales para realizar cursos de una semana o voluntariados más extensos fuera del país. Según destacó el responsable de la organización, esta sinergia entre agentes de distintas procedencias es lo que da lugar a la oferta de actividades regulares, que son abiertas y gratuitas.

“Cada cierto tiempo tenemos gente yendo y viniendo”, declaró Sequeiro, como ocurre con las incorporaciones más recientes, dos voluntarias de Holanda que llegaron a Ferrol el sábado. Desde su origen en 2013, más de 100 jóvenes han sido acogidos en Ferrol, alrededor de 50 fueron enviados a realizar proyectos en el extranjero y más de 250 participaron en proyectos internacionales en Ferrol o en otros puntos de Galicia. Además, actualmente la entidad cuenta con cerca de una quincena de usuarios que realizan actividades habitualmente.

Krete Saluste, de Estonia, es otra de las personas que trabajan desinteresadamente en la entidad y la que más tiempo lleva en Ferrol en este momento, desde junio, por lo que realiza la función de “mamá del grupo”. Esta chef de cocina es un ejemplo de que la formación es independiente del voluntariado, ya que aparte de dedicarse a tareas similares a las que desempeña Camilla Checchi también ayuda en temas que van desde la burocracia al mantenimiento de la huerta en Canido.

Ferrol para el mundo

Uno de los trabajos a realizar por  cada uno de los voluntarios es la elaboración, una vez al mes, de los vídeos que van subiendo al canal de Youtube de Xeración, los denominados “Monthly news”. Se trata de contenidos en inglés que tienen libertad para idear, en los que deben exponer como ha sido su mes.

Uno de los objetivos es aprender a dominar la narrativa audiovisual de forma práctica, aunque no es el único. Como refiere Fran Sequeiro, a través de esta iniciativa se lleva a cabo “un buen ejercicio para desarrollar la creatividad, para promocionar Ferrol y también para dar a conocer las actividades”.

Así, esta plataforma alberga vídeos muy diversos, algunos con miles de visitas, entre los que se encuentran temas interesantes para sus creadores como una guía turística de la ciudad, proyectos que van desarrollando, características locales que les parecen atractivas o un relato sobre la comida y la bebida de proximidad. Por lo tanto, en las grabaciones se exhiben desde un invernadero en Ares hasta su hogar temporal en Ferrol.

Stop Eucalipto y Cousateca, las iniciativas en las que trabajan esta temporada

La filosofía en busca de un futuro más sostenible se advierte en buena parte de las actividades que desarrolla Xeración, que con el inicio de 2025 se embarca en nuevos proyectos.

Uno de ellos es el denominado Cousateca, próximamente disponible la Casa da Xuventude, “que va a ser como una biblioteca de cosas”, indica Fran Sequeiro, que evita el consumo innecesario para algo que se requerirá tan solo por unas horas. Esta iniciativa constituirá “un punto de encuentro en el que la gente puede donar y dejar los objetos que no usa, para poder prestárselas a otra”, de manera que se realice una mejor gestión de los artículos que “normalmente usamos una vez al año, como puede ser un taladro o una tienda de campaña”, continúa.

El otro proyecto protagonista de la temporada se llama Stop Eucalipto, “una plataforma en la que buscamos poner en contacto entidades que trabajan en el tema de las deseucaliptizaciones y reforestaciones, con propietarios de montes que igual quieren recuperar su monte, pero no tienen el contacto adecuado”. La finalidad es facilitar la recuperación del bosque autóctono, un objetivo para el que colaboran con la asociación Betula, que se dedica precisamente a esta tarea, aportando habitualmente la mano de obra que ofrecen los voluntarios.