El Kremlin aseguró hoy aún que no hay una "hipótesis definida" sobre la autoría de atentado del viernes contra la sala de conciertos Crocus Ciy Hall que causó al menos 137 muertos y que fue reivindicado de inmediato por el Estado Islámico.
"La investigación continúa, de momento no se ha hecho pública ninguna hipótesis definida", dijo el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa telefónica diaria.
El portavoz del Kremlin contestó así a la pregunta de por qué en las declaraciones oficiales de Putin y otros altos funcionarios rusos sobre el brutal ataque terrorista no se menciona al Estado Islámico.
"Se habló solo de datos preliminares, aún no ha habido hipótesis", explicó e insistió: "Hay que esperar la información de los cuerpos de seguridad".
Además, Peskov defendió la actuación de los servicios de seguridad rusos, sometidos a duras críticas en las redes sociales.
"Los servicios de seguridad trabajan incansablemente y hacen frente a todas las amenazas, a todos los desafíos que afronta nuestro país y nuestra sociedad", dijo.
Subrayó que los servicios secretos rusos "operan por su cuenta" y negó que haya algún contacto al respecto con sus homólogos occidentales.
El portavoz de Kremlin agregó que "no hay ni una sola ciudad ni un solo país que esté totalmente protegido de la amenaza del terrorismo".
"La lucha contra el terrorismo es un proceso permanente que exige una plena cooperación internacional", subrayó, para añadir que actualmente, en este "periodo de confrontación, agudizado al máximo, no es que no haya cooperación en plena medida, no la hay en ninguna medida".
En su mensaje a la nación el sábado el presidente, Vladímir Putin, no mencionó en ningún momento al Estado Islámico a una supuesta amenaza yihadista, pero sí indicó que los terroristas se dirigían a la frontera con Ucrania.
El Estado Islámico del Jorasán, que ha reivindicado la autoría de la masacre de Moscú, con al menos 137 muertos, ha estado "estos últimos meses" detrás de "varias tentativas" de atentados en suelo francés, afirmó este lunes el presidente de Francia, Emmanuel Macron, desde la Guayana francesa.
Macron agregó que teniendo en cuenta las "ramificaciones" e "intenciones" del Estado Islámico de Jorasán se ha establecido la alerta máxima en Francia "como medida de precaución".
En una declaración al inicio de una visita a ese territorio de ultramar en Sudamérica, el presidente francés indicó que la decisión, tomada el domingo, se basa en "elementos creíbles y sólidos".