Las atracciones son, sin duda, un aliciente más en cualquier fiesta patronal que se precie. Pontedeume cuenta los días para celebrar las suyas, las de As Peras, con un cambio en la ubicación de los feriantes con respecto a los últimos años. Hasta el momento, los más pequeños de la casa –y los no tanto– acudían a estas instalaciones recreativas en la avenida Ricardo Sánchez, que se cortaba al tráfico desde la gasolinera. La previsión es que en esta ocasión se traslade, al menos las de menor envergadura, hasta la zona del paseo marítimo, un lugar que no convence del todo al colectivo. “Ellos no piensan ni en el suelo ni en nuestros métodos para montar. Ni siquiera nos han citado antes para comentarlo y esto es algo que hay que hacer con bastante tiempo”, comenta Raquel, una de las afectadas por el cambio de ubicación.
Añade que les preocupa la garantía que ofrece el paseo marítimo, diseñado para “el disfrute, para caminar, para andar en bicicleta... pero nos asusta que no haya un estudio del suelo. Nosotros somos siempre los que arriesgamos, porque es nuestro medio de vida. No queremos montar en una ubicación que no nos da fiabilidad”.
Esta feriante alude a que en el lugar propuesto en el malecón “no cabemos todos los compañeros. Está muy reciente también el accidente de Vigo, del que no sabemos todavía las causas. Pero nosotros no tenemos por qué acatar cualquier forma de montaje. Yo entiendo que unas camas elásticas las puedes instalar allí, pero hay otros aparatos que pueden llegar a las 30 toneladas”, añade Raquel. “¿Va a soportar el malecón ese peso o las vibraciones? Eso es un terreno ganado al mar. No hay un estudio del suelo, solo un proyecto de una empresa de seguridad, que nos dicen que es orientativo. Nosotros no podemos jugar con la con la seguridad de los usuarios. Tampoco con nuestro medio de vida, porque respondemos con nuestra familia, con nuestro patrimonio y con nuestras herramientas”, alega.
Todo esto, explica la feriante, está afectando al colectivo. “Está creando malestar entre nosotros: unos quieren montar y otros dicen que tenemos que estar todos juntos. Hay mucha controversia. Pero no es un capricho nuestro”, añade la afectada.
Por su parte y a preguntas de este Diario, la responsable de Cultura, Alejandra Bellón, explica que la gestión de las atracciones corresponde a la comisión de fiestas. Añade que el cambio de ubicación reside en que “en Ricardo Sánchez era un tetris. Por seguridad era imposible meter a la gente por ahí, incluso le costaba pasear por el medio de las atracciones. Además había que cortar toda la vía y hacer un cambio de sentido de otra calle. En esas fechas empieza la actividad de los colegios y había que sacar a los autobuses por el Camiño Estreito. El año pasado ya se planteó la idea y la Policía Local nos decía que por seguridad no es la mejor opción”.
La edila indica que sí se ha tenido en cuenta el tonelaje de las atracciones para pesar en esta ubicación. “Les planteamos la idea de que se instalasen en la parte más ancha del paseo, frente al instituto, sobre la zona ajardinada y sobre el carril bici, que es más firme que las losetas. En realidad no hay un cambio muy drástico de ubicación porque siguen en la misma zona, solo que en una calle paralela. Las atracciones de mayor peso irán en el aparcamiento junto a la gasolinera y, el resto, a lo largo del paseo marítimo. Ahora mismo están con las negociaciones pero confío en que se llegue a un acuerdo para que todas las atracciones se puedan instalar”.