La insuficiencia cardíaca afecta a 800.000 personas en España, una población equivalente a la que vive en la ciudad de Valencia, y es la principal causa de hospitalización entre personas mayores de 65 años. Según ha explicado farmacéutica Bayer aproximadamente la mitad de los que padecen la afección la sufren con fracción de eyección reducida (ICFEr), que significa que el porcentaje de sangre que bombea el corazón es menor al 40 %. La enfermedad tiene una mayor prevalencia en personas adultas y mayores, y afecta al 2,7 % de la población de más 45 años y al 8,8 % de más de 74.

La significativa incidencia de la enfermedad se traduce en unos elevados costes socioeconómicos para el Sistema Nacional de Salud, que representa un 3,8 % del gasto. El empeoramiento de la enfermedad y la hospitalización de los pacientes tienen una estrecha relación en el impacto en su calidad de vida y en la sostenibilidad del sistema, puesto que uno de cada cuatro pacientes tienen posibilidades de reingresar en los primeros seis meses desde el alta.

Además, se calcula que aproximadamente un 30 % de los pacientes con ICFEr crónica tendrán al menos un episodio de empeoramiento durante el primer año tras el diagnóstico, y con cada rehospitalización el riesgo de muerte se duplica. "El envejecimiento de la población asociado al incremento de los factores de riesgo cardiovascular, junto a la mejora en el diagnóstico y tratamiento de los eventos cardiovasculares agudos, provocan que la insuficiencia cardíaca tenga cada vez una mayor incidencia", ha apuntado Guido Senatore, director médico de Bayer España.

La insuficiencia cardíaca tiene otras consecuencias en los pacientes y su entorno, puesto que el 80 % de las personas que conviven con esta enfermedad declaran que la hospitalización les ha impactado emocionalmente, mientras que el 45 % manifiesta tener miedo a volver a empeorar y reingresar, según un estudio de Cardioalianza