la Lotería de Navidad inició ayer sus ventas y apuesta por convertirse en el “souvenir” favorito de los veraneantes que acudan a los más de 12.000 puntos de venta repartidos por toda España y compren su décimo como recuerdo de sus vacaciones.
La presidenta de Loterías y Apuestas del Estado, Inmaculada García, anunció ayer el comienzo de la venta de décimos para el tradicional sorteo de Navidad que se celebra el 22 de diciembre en una rueda de prensa en la que se presentó la habitual campaña estival, que este año apela a los millones de turistas, nacionales y extranjeros, que cada año veranean en nuestro país.
La campaña, bajo el lema “¿Qué recuerdo quieres llevarte este verano?”, refleja la costumbre universal de comprar y regalar un detalle típico del lugar de vacaciones y, en clave de humor, propone que, de entre todos los posibles, el veraneante escoja uno de los 170 millones de décimos que salieron a la venta ayer. En un anuncio para televisión que se emitirá durante todo el verano, decenas de personas celebran ante las cámaras de un informativo ficticio haber ganado el Gordo de este año, “el abanico con puntilla y estampado folclórico”, que exhiben los premiados con orgullo ante las cámaras en lugar del décimo habitual.
Así, en su formato televisivo, pero también en el radiofónico y de cartelería, la campaña recupera los souvenirs más habituales de nuestro país, como “el cangrejo con imán” o “la figurita de delfines” y recuerda al espectador que, de entre todos ellos, solo hay uno que puede hacer ganar el Gordo.
Y es que el Gordo puede ser uno de los décimos que salieron a la venta ayer en toda España: 170 series de 100.000 números cada una, emisión que asciende a 3.400 millones de euros, de los que el 70%, 2.380 millones, se reparten en premios, igual que el año pasado.
El Gordo, también como el año pasado, repartirá 640 millones de euros en décimos (y no en forma de abanicos, como en la campaña) lo que supone 4 millones por serie y 400.000 euros por décimo.