Más de un millón de personas han muerto en todo el mundo por Covid-19, según las cifras oficiales difundidas ayer por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Esta cifra refleja únicamente las muertes que se atribuyen al coronavirus desde finales del año pasado, cuando el virus circulaba ya de forma intensa en China, de donde muy poco después saltó a otros países.
La barrera del millón de fallecimientos que se superó ayer no considera el subregistro que existe en países donde el acceso a los test de diagnóstico es limitado ni las muertes ocasionadas por la interrupción o la incapacidad de los servicios sanitarios para atender a enfermos crónicos o pacientes con dolencias graves súbitas.
Número simbólico
“Hemos llegado a una cifra simbólica, pero en el sentido negativo, con un millón de muertos que hay que lamentar, uno por uno. Ningún país está a salvo, ninguno ha salido completamente de esta crisis, pero hay señales de esperanza sobre todo en el manejo clínico de los pacientes”, declaró la directora del Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente de la OMS, María Neira.
La media de muertes diarias por el Covid-19 se ha situado entre las 4.000 y 5.000 diarias en las últimas semanas, y ayer se registraron 5.100.
Por otra parte, los casos confirmados de Covid-19 superaron ayer los 33,2 millones, de acuerdo con los datos de la OMS, con 293.000 nuevas contaminaciones en las últimas 24 horas, lo que supone un incremento diario inferior a la media de las últimas semanas.
Dificultades con los datos
Neira reconoció que hay países que tienen dificultades en la notificación de casos y muertes, sea porque no pueden confirmar la causa de los fallecimientos con pruebas PCR o porque las víctimas fueron atendidas en lugares que no cumplen con notificar.
También está el miedo que las familias pueden tener de declarar una muerte por Covid-19, entre otras razones por los protocolos de enterramiento que esta situación impone.
Neira reconoció por ello que la cifra de un millón de muertes puede ser conservadora y deja “un mensaje triste y duro que nos hace reflexionar sobre la necesidad de una solidaridad y unión para luchar contra la pandemia”.
En el continente americano los decesos han superado más de 550.000, una cifra que supera a los registrados en el resto del mundo, mientras que los casos acumulados son cercanos a los 16,5 millones.
Por fallecimientos, Europa es la segunda región más afectada del mundo, con más de 235.000 víctimas mortales, seguida de Asia oriental y del Sur, con 113.000 muertos, de los cuales 96.000 corresponden a India.
España aparece hoy como el noveno país con más muertes acumuladas desde el inicio de la pandemia (31.411), lo que implica una disminución del ritmo diario de las mismas con respecto a días anteriores, en los que ocupaba el sexto lugar. Al respecto, Neira comentó que en España “la tasa de letalidad está bajando mucho y esto es evidente”.
“Si comparamos la letalidad de hoy con la que se veía en marzo ha habido un descenso importante”, agregó la directora de Salud Pública de la OMS.