Grupos de trabajadores de Ence y auxiliares han endurecido sus protestas en defensa de la continuidad de la pastera en Lourizán, después de que la Audiencia Nacional estimase los recursos que Greenpeace y el Ayuntamiento de Pontevedra presentaron contra las resoluciones de la Administración central por las que se acordó, por un periodo de 60 años, la prorroga a la concesión de Ence.
Así, arrancaron este miércoles cortando el tráfico en los accesos a Pontevedra y han hecho barricadas con la quema de neumáticos, además de lanzar bengalas, provocando numerosos atascos y obligando a reorganizar el tráfico.
En concreto, sobre las 8,30 horas cortaron el tráfico en la rotonda ante la fábrica, interrumpiendo la circulación en la autovía de Marín, que enlaza con la AP-9, y en la entrada a la ciudad por la N-550.
A lo largo de la mañana marcharon por la ciudad y su primera parada fue la Delegación Territorial de la Xunta. El presidente del comité de fábrica, Pablo Bacariza, se ha quejado, en declaraciones a los medios, de que la Xunta no les ha respondido a su petición de reunión.
"A raíz de la sentencia, vimos que cambió de opinión en distintas ocasiones y queremos conocer de primera mano qué solución proponen para nuestro problema porque nosotros lo que no queremos es que pare la producción bajo ningún concepto salvo que haya una solución; y lo que vemos es que hacen declaraciones, pero luego se esconden", ha lamentado.
"Queremos que todas las administraciones implicadas en nuestro problema nos den una solución. Es lo que veníamos reclamando desde el comité de fábrica y ahora, conjuntamente, con los compañeros de oficinas", ha añadido, mientras que los trabajadores movilizados coreaban consignas como 'Ence sí, paro no'.
Tras acudir a la delegación de la Xunta, se han desplazado también hasta la Subdelegación del Gobierno y el Ayuntamiento. Del Consistorio, Bacariza ha dicho que no esperan "nada". "Ya fue el que nos metió en este problema", ha lamentado, en el marco de unas protestas en las que los trabajadores volvieron a lanzar rollos de papel higiénico contra las sedes de las administraciones.
Por su parte, la portavoz del gobierno local de Pontevedra, Carme Da Silva, ha acusado al Partido Popular de "alentar y propiciar situaciones de violencia" como la protesta de este miércoles. "Volvemos a vivir hoy en Pontevedra una jornada de violencia, consecuencia de la situación en la que está tanto la empresa como el PP alentando este tipo de prácticas", ha dicho la portavoz municipal.
Da Silva ha reiterado que la situación en la que está Ence en Lourizán "es consecuencia directa de las decisiones empresariales de Ence y de las decisiones políticas del Partido Popular", tanto en la Xunta como en el Gobierno del Estado, que "fracasaron en su estrategia" ya que "sabían que tenían que buscar una alternativa" pero "intentaron confundir a los trabajadores y a la sociedad de Pontevedra".