El mundo militar, religioso, cultural, político o industrial estará representado en esta “Semana do patrimonio invisible” que se pone en marcha como iniciativa novedosa en Ferrol, a través del área que dirige la edil Eva Martínez y con el desarrollo de la firma Trivium, pero que ya está consolidada en otras ciudades como Pontevedra o Santiago.
Así, llegan a Ferrol la próxima semana estas visitas guiadas que permitirán acceder al visitante a espacios que normalmente no están abiertos al público, ya sea por tratarse de instalaciones militares o edificios públicos o incluso por haber ya desaparecido físicamente.
La concejala de esta área y el coordinador de Trivium, Estratexias de Cultura e Turismo, César Abella, dieron a conocer ayer los contenidos de esta “Semana del Patrimonio invisible” que echará a andar el día 15 y se prolongará hasta el 18, con cinco o seis visitas diarias a un total de ocho espacios de la ciudad, lo que supondrá 25 recorridos en total, con 360 plazas disponibles. Cada persona, sin embargo, podrá acudir a un máximo de tres para facilitar la mayor asistencia posible.
La inscripción se abrirá el próximo lunes a las cinco de la tarde en la página web, habrá que cubrir un formulario y recibir a través del correo electrónico la confirmación pertinente.
Las instalaciones que se podrán visitar son la Estación Naval de A Graña, el Casino ferrolano, la iglesia y el cementerio de San Salvador de Serantes, el Pazo do Monte, el Archivo Intermedio Militar del Noroeste, el edificio del teatro Jofre, las antiguas fábricas de Ferrol Vello y el Palacio Municipal.
El objetivo de la iniciativa puesta en marcha por primera vez, como explicó la concejala Eva Martínez, es “ensinar á poboación o interior de inmobles habitualmente pechados ao público a través de visitas guiadas de pequenos grupos para que os veciños coñezan edificios cun valor patrimonial, histórico e cultural único e indiscutible”. Así, valoró el esfuerzo que desde el Concello ese está realizando con el fin de incentivar el interés de los propios ferrolanos por el patrimonio de la ciudad.