No habrá fuego amigo en la pista del Palais des Sports de Lyon. El Baxi Ferrol disputa en la tarde del jueves –20.00 horas– la, ahora, sí, última batalla antes de la final en la apetecible guerra que están librando las de Lino López en Europa. El ejército ferrolano tiene ahora como objetivo tomar la pista lionesa, a la que llegará con, a priori, una ventaja cómoda.
Las 31 “soldados” más con las que cuenta el grupo de la ciudad naval se ven en las filas del club ferrolano con mucha cautela, y más teniendo en cuenta los antecedentes de una formación gala que ya sabe lo que es darle la vuelta a una eliminatoria en casa –ya lo hizo ante el Spar Girona y Galatasaray–. Así, tanto el Baxi como el Asvel de Lyon buscarán hacer ese partido perfecto que les permita, en el caso de las ferrolanas, mantener la distancia cosechada en un espectacular encuentro en A Malata o, en el de las francesas, volver a demostrar de lo que son capaces en su pista.
“Las jugadoras de Yoann Cabioch ya han demostrado esta temporada que son capaces de mover montañas”, recordaban desde la entidad deportiva francesa en la previa del importantísimo encuentro de esta tarde. Pero, sin duda, enfrente se encontrarán una auténtica y pesada roca. Un Baxi Ferrol compacto y sólido, en el que en caso de aparecer alguna fisura en su superficie, aparece otra de sus integrantes para evitar filtraciones.
Una situación de la que es muy consciente el preparador galo pocas horas antes de este choque, que se podrá ver en la TVG2 y Canal FIBA, apuntando que en A Malata “estábamos bajo presión a todos los niveles, pero deberíamos haber gestionado mejor la situación. En este partido de vuelta las claves serán defender mejor, ser más eficientes en la dirección y replegarnos mejor en la transición defensiva”.
Eso siempre que les deje un camaleónico Baxi, con personalidad pero sabiendo adaptarse a cada uno de sur rivales, para uno por uno ir dejándolos en la cuneta de esta Eurocup que, partido a partido, va tiñéndose de azul y rosa.
Precisamente unos colores que también estarán en las gradas del Palais des Sports lionés, con la, seguro, ruidosa presencia de más de una veintena de aficionados locales, cuyos rugidos esperan llevar a las suyas a la final.