Hace unos días, mi buen amigo Armando Requeixo (como yo, integrado en el Centro Ramón Piñeiro de Santiago de Compostela y también colaborador de las páginas de “Nordesía” del Diario de Ferrol), me recordaba que en breves días cumplía éste su XXV aniversario y estaría muy bien que los dos colaborásemos en tan feliz ocasión. Feliz porque, como me recordaba Xosé María Fandiño, ambos éramos veteranos de sus páginas literarias.
Tras hablar con el director del periódico, Germán Castro, sólida figura protagonista de la historia y desarrollo de la prensa de nuestra ciudad desde hace décadas; también del Diario de Ferrol, del que fue uno de sus fundadores, abría esta cabecera sus páginas en 1999. Ferrol Diario (1969) y su efímero epílogo El Norte de Galicia (1980) fueron sus predecesores, juntamente con el veteranísimo El Correo Gallego (1878), que en 1938 pasaba a editarse en Santiago, donde continúa su azarosa singladura. Encrucillada, Aturuxo, Ferrol Análisis, Poesía Galicia, Concepción Arenal y otras surgieron en años anteriores.
Dice la letra del bien conocido tango “Volver” que veinte años no son nada. Todo es sin embargo relativo, y hoy vivimos tiempos de “usar y tirar” todo; todo es efímero, nada es sólido ni permanente. Así pues, estos veinticinco años del Diario de nuestro Ferrol, con el auge de la prensa digital y la palpable crisis de la tradicional en papel, son ciertamente meritorios como exponentes de una expandida prensa local que atiende primordialmente a la ciudad y a su comarca: Ferrolterra. A este ámbito de atención hay que sumar el cultural –sea en gallego o castellano– titulado “Nordesía” y sostenido y mejorado con empeño desde sus primeros pasos.
Coordinaban Nicolás Vidal y el ya mencionado Xosé María Fandiño aquellas entusiastas páginas que hoy cuentan también con los textos de un nutrido grupo de nuevos colaboradores; páginas que han ido creciendo en número, en temas y motivos tratados, en la presencia creciente en los mismos de la lengua gallega y en el número en aumento de sus firmas, entre los que quiero resaltar al propio Germán Castro con sólidos y documentados artículos con frecuencia de cuestiones ferrolanas.
El Diario de Ferrol es un espejo informativo de su ciudad de origen, a la que sirve y se debe. Ferrol, en términos de prensa, puede presentar un amplísimo catálogo de cabeceras que, desde 1845 al presente 2024, llegan a doscientas cincuenta. De ese plural y variado repertorio hace pertinente y documentado estudio mi buen amigo Guillermo Llorca Freire en su Historia da prensa ferrolá (1845–1992), libro al que acudo cuando se trata de periódicos, diarios, revistas, anuarios, boletines o sencillas hojas sueltas que en Ferrol han tenido siempre generosa acogida y libro que la ciudadanía ferrolana debiera tener... y consultar con frecuencia. Nuestro rico patrimonio de prensa propia lo merece.
Gracias, muchas gracias a este Diario de Ferrol en el que se me ha permitido colaborar alrededor ya de un par de décadas con libertad y tolerancia y donde nunca he tenido ni un solo problema. Gracias por su apoyo a un Ferrol con demasiados años en crisis. Gracias por su nulo espíritu censor y por sus esfuerzos para permanecer en la difícil tarea de contribuir a la vida social y cultural de la ciudad. Y en fin, mi deseo sincero de nuevas y reverdecidas primaveras para sus páginas y para la ciudad de Ferrol que lleva su nombre.
Luis Alonso Girgado es escritor e investigador